La consejera de Justicia de la Generalitat vota en la consulta de Barcelona

Pilar Fernández Bozal, la consejera de Justicia catalana, votó ayer en la consulta sobre la independencia de Cataluña que se celebrará el próximo domingo en Barcelona. Lo hizo a la salida de la sede de su departamento, en una de las mesas electorales instaladas desde hace días en Barcelona para que los ciudadanos puedan votar de manera anticipada en una consulta que carece de validez legal y que organizan diversos colectivos sociales.

El voto de la consejera de Justicia se suma al que emitieron la semana pasada el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, y el actual, Artur Mas. Pujol explicó que había votado sí; Mas no lo reveló, pero no se cuestiona que también lo hizo afirmativamente, aunque precisó que actuó a título individual y no en función del cargo. En el caso de Fernández Bozal, aunque el Departamento de Justicia se negó ayer a explicar el sentido de la papeleta invocando su carácter secreto, todo indica que la consejera votó no.

Antes de ocupar este cargo, Fernández Bozal era la jefa de la Abogacía del Estado en Cataluña y en octubre de 2009 redactó varios recursos contra la cesión de instalaciones municipales para la celebración de la consulta soberanista de Arenys de Munt (Barcelona), la primera de las celebradas en Cataluña y que meses después se extendieron.

En aquellos escritos, la entonces abogada del Estado argumentaba que la cesión de dependencias públicas con esa finalidad ponía en peligro la estabilidad política y social de España y equiparó esas consultas con las capillas ardientes en homenaje a etarras fallecidos que se instalaban en algunos Ayuntamientos vascos. Artur Mas salió en su día en defensa de la consejera argumentando que redactó esos escritos porque cumplía órdenes, y la propia Fernández Bozal ya anunció en su día que no descartaba votar en las consultas populares, como así ha sucedido finalmente. Otros tres consejeros del Gobierno de Mas han anunciado también que votarán en esa consulta. Entre ellos, el de Cultura, el exsocialista Ferran Mascarell.