Alicante y Elche aceptan que su distanciamiento las empobrece

En un mundo globalizado y en el que las necesidades de los ciudadanos trascienden el ámbito de lo local, la falta de entendimiento entre municipios vecinos tiene poco sentido. Alicante y Elche son el ejemplo de un distanciamiento y de una competencia histórica que no se ha sabido resolver a nivel supramunicipal, que con pasos muy tímidos tratan de matizar los respectivos ayuntamientos y que los ciudadanos dan pasos para cambiar. "No entenderse empobrece a las dos ciudades", resumió ayer uno de los participantes en el encuentro Diálogo Alicante / Elche. El papel de la sociedad civil, que organizó la PIC (Plataforma de Iniciativas Ciudadanas) en el Centre de Congresos Ciutat d'Elx.

El acto, calificado de "histórico", reunió a medio centenar de representantes de la segunda y la tercera ciudad de la Comunidad Valenciana. Juntas superan los 550.000 habitantes. Representantes de sanidad, de la universidad, de CC OO, de la cultura o del urbanismo debatieron sobre la necesidad de dejar de hablar solo en términos municipales y avanzar en el aprovechamiento de las sinergias existentes entre ambas urbes. El encuentro fue inaugurado por el alcalde de Elche, Alejandro Soler.En el encuentro, los distintos profesionales fueron desgranando sus opiniones sobre cómo resolver una distancia que ocasionalmente se ha convertido en "bronca" por motivos tan dispares como el agua, las infraestructuras o las universidades. Varios expertos, sin embargo, coincidieron en señalar que proyectos para acercar ambas urbes ha habido muchos: el triángulo Alicante-Elche-Santa Pola o el último libro coordinado por el urbanista Alfonso Vegara sobre el modelo territorial de la ciudad ilicitana son solo algunos de ellos. "En 1978 ya se hablaba del eje Alicante-Elche. Más de 33 años después se está en la misma situación", lamentó un urbanista. Planes sobran, hay que aplicarlos, reiteraron varios participantes.

También en el apartado de las primeras ideas más concretas aportadas en esta primera reunión de representantes de ambas ciudades, el profesor de periodismo Miguel Orts, a su vez uno de los independientes que ha incorporado Alejandro Soler en su lista para las próximas elecciones municipales, defendió que hay que cambiar el mapa universitario valenciano. El actual, aseguró, "es un disparate" y a modo de ejemplo consideró innecesarias la existencia de dos facultades de Derecho a tan poca distancia, en Alicante y en Elche. "Estamos dilapidando dinero público", criticó.

Foro ciudadano

"No podemos hablar de Alicante sin que hablemos de Elche", aseguró al inicio del encuentro Manuel Alcaraz, de la PIC. De la reunión, por ello, salió el compromiso de crear un foro ciudadano Alicante-Elche en el que participarán cinco representantes de cada una de las ciudades.

Este foro cuenta con un plazo inicial de un año para actualizar y analizar diversas cuestiones sobre las relaciones entre ambas urbes. Una de estas cuestiones será un análisis sobre las relaciones de movilidad entre los dos municipios, por ejemplo, en cuestiones laborales y económicas.

De la reunión, que se dilató durante tres horas, también ha salido el compromiso de fomentar este debate en sus distintas vertientes, por ejemplo, mediante la celebración de mesas redondas. "Hay sinergias entre Alicante y Elche y la relación está más normalizada", pero hay todavía mucho trabajo por hacer, explicó el alcalde de Elche al inicio de la reunión. La teoría está clara, hay que ponerse a trabajar, coincidieron en la reunión.