Recuperado el cuadro de Sorolla robado en la casa museo de Benlliure
Casi un año después, la pequeña pero valiosa tablita ha vuelto a su casa. El cuadro que Joaquín Sorolla pintó en 1913 y regaló a su amigo y colega de pinceles José Benlliure, con la entrañable dedicatoria "a mi amigo Pepín", ha estado desaparecido durante casi un año pero ya vuelve a estar en la casa museo de Benlliure. Agentes de la Policía Local de Valencia, en colaboración con el Cuerpo Nacional de Policía, han conseguido recuperar el cuadro de Sorolla que fue sustraído el 9 de abril de 2010 de la institución ubicada en la calle de Blanquerías de Valencia, según informó ayer el Ayuntamiento. Y aunque no han trascendido más detalles sobre la identidad del autor del robo, los agentes han detenido en relación con estos hechos a una persona, que ya ha pasado a disposición judicial. El cuadro, titulado El santero de la cofradía, es un óleo sobre tabla de un tamaño muy pequeño, de apenas 19 centímetros de alto por 13 de ancho.
La pequeña tabla fue sustraída con el museo abierto y visitantes dentro
La obra ha figurado entre las 12 más buscadas por la policía judicial
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, manifestó sentirse "feliz y satisfecha" por la noticia y felicitó a los agentes de la Policía Local por el trabajo realizado para conseguir la recuperación del Sorolla. "Es una excelente noticia que el Sorolla vuelva al Museo Benlliure para que pueda ser admirado por todos los valencianos", explicó la alcaldesa, "y tengo por ello que destacar, felicitar y agradecer la constancia y la profesionalidad demostrada por la Policía Local para, investigando las pruebas con que contaba, llegar a la recuperación de esta obra de arte".
Además de la recuperación del cuadro de Sorolla, se ha identificado y detenido a una persona, que ya ha pasado a disposición judicial. No obstante, el Consistorio señaló que los detalles de la intervención se ampliarán "cuando la autoridad judicial dé por cerrada la investigación de los hechos".
La noticia saltó el mismo día de la sustracción. El robo ocurrió con el museo abierto y visitantes en las salas en torno a las ocho de la tarde. La brigada científica de la policía interrogó a los presentes y se dispuso a visionar las imágenes de las cámaras de seguridad pero no se obtuvieron resultados inmediatos. La pequeña tabla propiedad del Ayuntamiento de Valencia, una escena llena de luz iluminada por un portalón al fondo que escenifica a un santero sentado de perfil ante una mesa, había desaparecido misteriosamente.
El cuadro de Sorolla incluso ha llegado a figurar entre las 12 obras de arte robadas más buscadas por la Brigada de Patrimonio Histórico, adscrita a la Comisaría General de Policía Judicial, junto a cuadros de Picasso, Matisse, Van Gogh y Cézanne. Algunas de estas obras fueron sustraídas hace más de 20 años, como las de Velázquez que desaparecieron en 1989 del Palacio Real de Madrid.
El robo de El santero de la cofradía desató las críticas de la oposición por la escasez de medidas de seguridad de los museos valencianos. Pero ayer, el Grupo Municipal Socialista felicitó a la Policía Local por el éxito de la operación para recuperar el cuadro de Sorolla. El concejal Juan Soto mostró su satisfacción por el resultado de las investigaciones y la eficacia de los agentes, pero al tiempo recordó que el robo se produjo como consecuencia de un cúmulo de carencias en materia de seguridad.
También criticó que la alcaldesa no haya paliado estas deficiencias de los museos: "Barberá ha corrido para apropiarse de un éxito policial mientras ha estado desaparecida durante un año de la foto de la responsabilidad por las deficiencias que facilitaron el robo", añadió Soto.
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