BBK mantiene "en pleno vigor" su oferta a Vital, pese al veto peneuvista

La fusión de las cajas vascas sigue siendo una partida abierta. Casi dos meses después de que el PNV abortase la fusión fría que BBK y Vital tenían muy avanzada, la entidad vizcaína recalcó ayer que mantiene "en pleno vigor su oferta" y la retomará "cuando sea posible" y existan garantías adecuadas de que el proceso llegará a buen puerto.

El presidente de BBK, Mario Fernández, aprovechó el marco de la Asamblea General de la entidad, reunida ayer en Bilbao, para pronunciarse por vez primera públicamente sobre el proceso paralizado por el PNV, que le ha supuesto, además, un cierto desaire personal cuando él mismo había dado garantías el pasado noviembre, apenas un mes antes de que la fusión a dos saliese a la luz, de que esta contaba con el visto bueno expreso peneuvista.

BBK es la caja española con mayor cobertura del sector ante el ladrillo

Sin hacer la menor alusión al PNV, Fernández resaltó en su discurso ante la asamblea que la fusión fría con Vital, que incluía una invitación a Kutxa para que se sumase a la misma y que la caja guipuzcoana desdeñó, le sigue pareciendo a su entidad una aproximación "razonable". Y, al tiempo, un movimiento que podría abrir un proceso de concentración de las cajas vascas, "respetando las peculiaridades territoriales y la singular estructura institucional" de la comunidad autónoma. Y por si no hubiera quedado clara su postura introdujo una frase sobre el texto de su discurso previamente repartido para precisar que "la propuesta forma parte de la estrategia de integración de las tres cajas, que es en lo que está este Consejo de Administración".

En el posterior turno de preguntas, el responsable de BBK abundó que no se opone a una fusión en conjunto, pero cuando se ha intentado hasta ahora ha fracasado. Y enfatizó la necesidad de garantías para embarcarse en un proceso que no debe iniciarse sin que se esté seguro de su éxito.

Fernández dejó caer una velada crítica al veto político cuando apuntó que la propuesta "vuelve a cobrar pleno sentido" en plena transformación legal y económica del sector. En otro momento, el máximo mandatario de la entidad recordó que 40 de las 45 cajas españolas se han embarcado en los últimos tiempos en operaciones de fusión o concentración. De las cinco que no lo han hecho, dos son vascas: Kutxa y Vital. Y otro recado para nacionalistas y soberanistas: cualquier análisis de futuro debe evitar "la tentación de crear 'marcos propios' artificiales o ficticios" para las cajas de la comunidad autónoma.

En cualquier caso, la caja vizcaína no se va a quedar parada. Fernández reiteró que debe ser "un objetivo prioritario" para el grupo que encabeza alcanzar una mayor dimensión que la actual. Aun tras haberse hecho con Cajasur, el grupo se halla todavía bastante alejado del tamaño medio al que ha pasado el sector con las últimas operaciones (78.173 millones de euros de activos medios, frente a 48.766 millones que ha dado como resultado la integración entre BBK y Cajasur).

Junto a estudiar las oportunidades de crecer, la caja vizcaína analizará la conveniencia de aportar su negocio bancario a una entidad que tenga la naturaleza de banco, manteniendo, en todo caso, a BBK como caja de ahorros.

Además de detallar los resultados del pasado ejercicio, Fernández destacó la situación en que se halla BBK tanto por las nuevas exigencias sobre capitalización como en exposición a activos problemáticos ligados al ladrillo. En el primer aspecto, BBK, con una ratio de capital del 19,8%, es, con mucha diferencia, la entidad en mejor situación de todo el sistema financiero español tras la revisión que hizo pública anteayer el Banco de España. Y aunque se sumase Cajasur, si bien los datos que se han tenido en cuenta son los correspondientes a 31 de diciembre pasado, cuando la caja cordobesa aún no había sido formalmente transferida a BBK, el resultado seguiría estando entre las cajas más capitalizadas del sistema (12,3% de capital principal).

Respecto al segundo apartado, el grupo ha aflorado como dudoso todos los activos problemáticos de Cajasur. El resultado es que, incluyendo a la entidad andaluza, BBK es la caja española con mayor nivel de cobertura del sector (39,7%) y menor exposición al riesgo promotor, tanto computado sobre balance (8%) como sobre inversión crediticia (10,4%).