Sanidade no negociará el catálogo hasta que el Gobierno retire el recurso
El ministerio insiste en que la Xunta debe adaptar la norma a la ley estatal
El recurso del Gobierno central ante el Tribunal Constitucional sobre el catálogo de medicamentos priorizados de la Consellería de Sanidade ha congelado las negociaciones entre la Xunta y el Ministerio. Con el catálogo paralizado por el alto tribunal, la conselleira Pilar Farjas ha estancado también las conversaciones con Sanidad en un único punto, la retirada del recurso. "En las sucesivas reuniones con el ministerio solo cabe un punto de negociación, la retirada del recurso", afirmó ayer Farjas en el Parlamento.
El primer ejemplo no se hizo esperar. Ayer mismo un equipo de asesores jurídicos del ministerio se reunió en Santiago con representantes de la consellería pero "sin nada nuevo" bajo el brazo. A pesar de las dos horas que estuvieron reunidos, el encuentro no sirvió para avanzar en una solución para aplicar el catálogo gallego. Fuentes de Sanidade explicaron que el ministerio no presentó "ni una sola propuesta", informa Europa Press. En la línea que avanzó Farjas en el Parlamento, la respuesta de la Xunta se limitó a comprometer su disposición para mantener el diálogo y la negociación "siempre que se retire el recurso". El Ministerio de Sanidad, por su parte, emplazó a la consellería a que presente "una propuesta concreta de modificación legal" de la normativa por la que se creó el catálogo. Sobre la retirada del recurso, Sanidad evitó posicionarse hasta "no conocer los cambios concretos y el procedimiento para hacerlos operativos" que le ha reclamado a la consellería. Con llamadas cruzadas entre uno y otro departamento para mover ficha y presentar una propuesta, el ministerio citará la próxima semana en Madrid a representantes del Servizo Galego de Saúde (Sergas).
La factura del gasto farmacéutico se redujo en 8,4 millones en febrero
Mientras, los servicios jurídicos de la Xunta están trabajando para recurrir la suspensión del catálogo en el menor tiempo posible y evitar que la revisión se produzca dentro de cinco meses. Farjas, sin embargo, no aclaró por dónde irán las alegaciones de la Xunta ni cómo se planteará la defensa de un catálogo que invade competencias del Estado. El BNG, que dio su apoyo a ley por la que se creó el catálogo, reclamó ayer a Farjas que especifique cuál será ahora la actuación de la Xunta. "Viene aquí y nos dice qué malos son los de Madrid. ¿Cuál es su plan B?", preguntó la diputada Ana Luísa Bouza. "Lamentarse no es la solución", incidió. La titular de Sanidade obvió la cuestión central y explicó que, como solo están recurridos los artículos de la ley que atañen al catálogo, la Xunta seguirá desarrollando otros aspectos de la norma. El diputado socialista Modesto Pose defendió el papel del Gobierno central y pidió a Farjas que centre su trabajo para reducir la factura sanitaria en los aspectos sobre los que tiene autoridad. "Tiene competencias para ejercerlas. Ejérzalas y deje a los demás hacer su trabajo, que lo están haciendo bien", dijo.
La defensa de un catálogo "legal, leal y eficiente" por parte de Farjas contó con los datos de ahorro de la factura farmacéutica del Sergas de febrero. En el mes pasado, la Xunta gastó 8,4 millones de euros menos que en el mismo periodo de 2010. El gasto ha pasado de 74,8 a 66,8 millones. En porcentaje, la disminución es de un 11%. "Más de ocho millones que quedaron en los bolsillos de los gallegos para reinvertir en la sanidad pública", aseguró Farjas que dijo no comprender a un Gobierno central que "por una parte pide ahorrar, pero cuando se ponen medidas eficaces encima de la mesa, recurren".
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