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Arrecia la bronca por los ERE

Griñán: "Si Arenas me acusa de un delito, lo tendrá que decir en un juzgado" - González Pons pide "formalmente" la dimisión del presidente y de Chaves

Las presuntas irregularidades en los expedientes de regulación de empleo (ERE) financiados con fondos públicos sigue dominando la política en Andalucía, donde este asunto ha desplazado al debate y las propuestas sobre la crisis económica.

El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, instó ayer al líder del PP, Javier Arenas, a acudir a los tribunales, después de que este afirmase que Griñán "supo, tapó y siguió autorizando lo que pasaba" con los ERE. "Si Arenas me acusa de un delito, me lo tendrá que decir en un juzgado", dijo Griñán. "Podemos hablar él y yo y seguro que le gano porque el PP no ha asumido responsabilidad política nunca y el PSOE siempre", subrayó.

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La polémica por los ERE también llegó a Madrid, donde el PP logró convertir el Congreso de los Diputados en el Parlamento de Andalucía, centrando la mayor parte de sus preguntas al Gobierno en los ERE, con el vicepresidente tercero, Manuel Chaves, como objetivo preferente.

Hasta cuatro diputados populares exigieron la dimisión del ex presidente andaluz y en sus intervenciones fueron mucho más allá que hasta ahora, acusando directamente a Chaves y a Griñán de haber creado un "régimen de corrupción en Andalucía". El PP demostró que esa comunidad es objetivo preferente, que el asunto le sirve para evitar escándalos propios como Gürtel y que con los ERE ha encontrado una herida sangrante en el PSOE.

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Chaves respondió intentando echar en cara al PP su actuación en Gürtel y el hecho de que mantenga a Francisco Camps como candidato, pese a estar imputado por cohecho. El vicepresidente, además, aseguró que solo hay 70 casos de presenta irregularidad, frente a miles de expedientes de este tipo en los que ha intervenido la Junta. Chaves aseguró que el PP "usa la mentira, la calumnia y la insidia" y concluyó con un paralelismo: "Está en los manuales políticos de la derecha, la política del escándalo para alcanzar el poder buscando la destrucción política y personal del adversario. Lo practicaron ustedes con Felipe González, y ahora, salvando las distancias, lo quieren hacer conmigo, enfangando".

El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, dio una rueda de prensa en la sede popular en la que pidió "formalmente" la dimisión de Chaves y de Griñán. El popular considera probado que ambos conocían las irregularidades de los ERE. A esta conclusión llegó Pons por la lectura de las conclusiones del informe de la Intervención General en el que considera no adecuado el procedimiento administrativo elegido para tramitar las ayudas de la dirección general de Trabajo. Estas conclusiones, publicadas por EL PAÍS, se refieren solo al trámite burocrático escogido y no a la existencia de intrusos en los ERE. Este informe fue remitido a la Consejería de Empleo en 2005, 2006 y 2007. En ese tiempo, el consejero de Hacienda, del que depende la Intervención, era Griñán. A raíz de ese informe, la inspección auditó 20 expedientes en los que que se consideró correcta la gestión, pero no el procedimiento, según dijo la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, el 8 de febrero y volvió a reiterar el pasado martes.

Por su parte, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, ratificó "de la A a la Z" sus afirmaciones sobre que Griñán "conoció, tapó y siguió autorizando" un procedimiento para la concesión de ayudas sociolaborales que no era el correcto porque "se lo dijo" la Intervención General de Hacienda. Pero mientras Arenas cuidó sus palabras, su portavoz parlamentaria, Esperanza Oña, sí dijo que Griñán "supo las irregularidades".

Le contestó el portavoz parlamentario socialista, Mario Jiménez, quien le pidió que acuda a los tribunales si tiene algo que denunciar sobre las irregularidades en los ERE.

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