Nestlé Nutrición, la revolución permanente
El grupo reformula anualmente la composición de unos 7.000 productos
Las materias primas procedentes de países en vías de desarrollo constituyen la base de la actividad industrial de la multinacional suiza Nestlé. Anualmente lleva a cabo compras por un montante superior a los 20.000 millones de euros. El grupo adquiere, por ejemplo, más de 800.000 toneladas de café verde sobre unas cosechas mundiales de unos siete millones de toneladas, el 11% de una producción mundial de cacao de unos 3,5 millones de toneladas y 12 millones de toneladas de leche, el doble de la producción española.
Nestlé es la primera empresa en el mundo en la fabricación de productos en el sector de la nutrición, salud y del bienestar, respondiendo al compromiso inicial del grupo. De acuerdo con esta filosofía, la multinacional cuenta con una treintena de centros de I+D en todo el mundo donde trabajan más de 5.000 personas y a la que se destinan anualmente casi 1.400 millones de euros.
La multinacional invierte al año en I+D más de 1.400 millones
Ha puesto en marcha planes de apoyo a productores de cacao, café y leche
Junto a la oferta de productos de gran consumo en el sector alimentario, el grupo mantiene una apuesta por la nutrición especializada para todo tipo de colectivos: niños, personas de más edad, enfermos con diferentes dolencias y necesidades alimentarias o embarazadas. Sobre una facturación total de unos 84.000 millones de euros, las ventas en productos de nutrición y de pharma suponen 14.000 millones. Ello se traduce cada año en la puesta en el mercado de nuevos productos y, sobre todo, la revisión y renovación de otros ya a la venta para mejorar los mismos desde diferentes ópticas, como la eliminación de grasas trans, supresión de sal, grasas saturadas o colorantes. En 2009 el grupo llevó a cabo la reformulación de más de 7.000 productos por razones de salud o nutrición.
El empeño de Nestlé en adecuar sus ofertas nutricionales a las necesidades de la sociedad no es una política aislada en la cadena de suministros y producción final del grupo, sino el último eslabón de una cadena de actuaciones que se inician en el conjunto de los países en vías de desarrollo en África, Asia y América Latina donde la compañía adquiere y transforma también las materias primas. Sobre un total de 450 plantas industriales, la mitad se halla en países en vías de desarrollo. Frente a estrategias industriales enfocadas sobre todo a comprar productos básicos allá donde existe la mejor oferta sin compromiso alguno, la política desarrollada por Nestlé está basada en la estabilidad, la fidelidad, la mejora de las condiciones de trabajo, la calidad y la productividad de los agricultores y ganaderos con una estrategia de permanencia.
La actividad de Nestlé en los países en vías de desarrollo supuso en el último ejercicio la existencia de 3,4 millones de personas que tienen alguna relación con su cadena de suministro y más de medio millón de agricultores con quienes se mantienen relaciones directas y una aportación a los mismos de microcréditos por un volumen de 37 millones de euros.
En el sector del café, el grupo ha puesto en marcha un plan por un montante de casi 400 millones de euros hasta 2020 por el que se contemplan programas de formación, asistencia técnica, entrega de plantas adaptadas a cada medio, para lograr una política de producción de calidad. Esta estrategia además se concreta en la obtención de granos de café para Nescafé y un paso más para el café destinado a Nespresso. Estas políticas se centran especialmente en Brasil, Colombia, Costa Rica, Guatemala y México.
En el cacao se aplica una estrategia similar en Costa de Marfil, Ecuador o Venezuela basada, además de en la asistencia técnica, en suministrar 20 millones de plantas hasta 2020.
Finalmente, en leche, el grupo compra más de 12 millones de toneladas en 30 países y destaca su apoyo a la producción en aquellos en vías de desarrollo, como India, basado en una política que va desde los apoyos y contratos con los ganaderos para la mejora de las explotaciones hasta la construcción de plantas industriales.
Todo ello en el marco de la estrategia del grupo suizo para la creación de valor compartido basada en el desarrollo del medio rural, la defensa del agua y la oferta de una alimentación nutricional, tanto para países industrializados como para poblaciones con menos recursos.
Llegó para quedarse
Hay multinacionales que vadean en función de las coyunturas económicas. Otras vinieron para quedarse. La presencia de Nestlé en territorio español se remonta al año 1905 con la puesta en marcha de la planta La Penilla en Cantabria para la fabricación de harina lacteada en función de las necesidades de la época. En la actualidad, el grupo factura cerca de 1.400 millones de euros con 5.600 trabajadores en 13 plantas. Como en el resto del mundo, mantiene una apuesta por la nutrición con 29 centros de investigación y desarrollo donde la innovación aporta el 12,3% de sus ventas. En el último año dedicó más de 160.000 horas a los programas de formación, y la política de sostenibilidad supuso la reducción entre 2005 y 2010 del 27% en los residuos, del 8% en energía y del 1,6% por tonelada de producción en las emisiones de CO2.
Su ubicación inicial en Cantabria hace más de un siglo supuso el punto de arranque para el desarrollo de una nueva política ganadera basada en el control integral del proceso, su integración en el medio rural y la sostenibilidad del medio ambiente. Entre 2008 y 2009, la empresa concedió microcréditos por un volumen de 800.000 euros a los ganaderos para la mejora de instalaciones. En 2010, excluyendo los anticipos mensuales, se suscribieron préstamos con 31 ganaderos por un importe de 376.000 euros, y para 2011 está prevista la concesión de otros 71 microcréditos por un montante de 800.000 euros con una cuantía mínima de 2.000 euros y un máximo de 36.000. El objetivo de los mismos debe ser la mejora de las condiciones de las explotaciones desde la perspectiva de la productividad, la rentabilidad y la calidad.
Junto a estas medidas funciona un acuerdo con la Universidad de Santiago de Compostela, el programa Triptolemos, para apoyar la gestión de los ganaderos, al que en el último año ha destinado otros 300.000 euros.
En el sector de la leche en España, Nestlé no se halla entre los primeros compradores, con un volumen de solo unas 130.000 toneladas.
En la actualidad Nestlé cuenta en España con 13 plantas en el sector alimentario en leche y derivados lácteos, helados, cafés, cacao, salsas, agua, ultracongelados, productos dietéticos, platos preparados o alimentos para mascotas. El grupo opera con medio centenar de marcas, entre las que destacan las diferentes versiones en cada producto de Nestlé, La Cocinera, Solís, Nesquik, Maggi, Litoral, Kit Kat, Aquarel, Perrier, Friskies o Nido. -
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