María de los Ángeles Santana, actriz y 'vedette' cubana

Decana de las actrices cubanas del teatro musical, el pasado martes 8 de febrero murió a los 96 años en La Habana María de los Ángeles Santana Soravilla, que había nacido en la misma ciudad el 2 de agosto de 1914. Hizo una parte importante de su carrera en España y su último papel en el cine fue en un corto del director español Benito Zambrano.

Se había iniciado para el cine en 1933 y su debú como protagonista fue en la mítica El romance del palmar (1938), compartiendo reparto con Rita Montaner. En 1943 se estableció en México, triunfando en espectáculos de revista con Jorge Negrete, Pedro Infante y Cantinflas. En 1951 llega a Madrid contratada como primera vedette del espectáculo Tentación, que fue un triunfo y estuvo cuatro años en cartel.

Después rechazó quedarse en España ante la oferta de Ernesto Lecuona para formar parte de su compañía, siendo la encargada de estrenar obras del compositor como Te vas juventud y Mariposas. Antes, la censura española había vetado su desnudo integral en ¡Conquístame! (1952) y controló férreamente sus apariciones en Barcelona en la obra Tropicana (1957), un sonado triunfo de la época.

Alternó el teatro con el musical y la zarzuela, y participó en montajes habaneros legendarios como Mujeres de Claire Booth Luce en 1958 y el musical Tia Meim de Patrick Dennis en 1970. Fue una de las fundadoras de la televisión cubana y llevó a cotas de leyenda su personaje de alcaldesa en el serial humorístico semanal San Nicolás del Peladero.

Entre 1942 y 1950 hizo importantes giras por EE UU, y fue la actriz que inauguró el teatro filmado para televisión con Un tranvía llamado deseo y La gata sobre el tejado de zinc. Se mantuvo en activo casi hasta el final de su vida, y su último papel cinematográfico fue polémico: Zambrano la escogió para el rol de una anciana lesbiana que se enamora de otra mujer en el corto El encanto de la luna llena.