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Reportaje:

Raíces de Valencia

Rablaci, hijo de la directora del IVAM y del portavoz del PP valenciano, presenta su obra en la Casa de Vacas

Patricia Ortega Dolz

Tiene tan solo 23 años (piercings en las orejas, chupa de cuero y zapatillas) pero sus obras ya han viajado a Tokio (embajada de España), Niza, Shanghai, Argentina, Cuba, Chile, Miami, México... y desde ayer llenan la Casa de Vacas del Retiro, adonde se ha traído las más profundas raíces de su tierra natal (Valencia) y las suyas propias: a su madre, Consuelo Ciscar, la directora del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), y a su padre, Rafael Blasco, el portavoz del PP en las cortes valencianas, que ayer se paseaban entre sus creaciones.

Rablaci, que oculta un poco sus orígenes con ese acrónimo (Rafael Blasco Ciscar) como nombre artístico, aterriza en Madrid con Raíces del desarraigo, nombre elegido por el comisario, Rafael Sierra, para esta exposición que explora ese concepto relacionado con la separación y las distancias que nos separan del origen y nos arrancan de cuajo de lo que nos es propio. La muestra, que se inauguró ayer, permanecerá abierta hasta final de mes (27 de febrero) y planta nada menos que las más profundas cepas de Valencia en Madrid.

Tiene solo 23 años y sus obras ya han viajado por todo el mundo
"Había un hueco y hemos traído esta exposición", dice el concejal de distrito

La obra que presenta Rablaci transmite una gran desolación y está formada precisamente por eso: enormes raíces arrancadas. "Son las raíces de los naranjos, el árbol más típico de Valencia, que me han ido dando conocidos, o conocidos de conocidos cuando iban a deshacerse de ellas", explicaba ayer el artista entre un reducido número de invitados que le doblaban la edad, entre los que se encontraba el concejal de distrito Luis Asúa.

-¿Cómo ha llegado hasta aquí la obra de este artista, señor Asúa?

-Había un hueco que nos dejó el artista José Noja, que se tenía que ir a Holanda, y a toda pastilla nos hemos traído ésta que venía desde Miami.

-¿Y lo de que sea hijo de Consuelo Ciscar y Rafael Blasco?

-Tenemos muy buena relación con Consuelo, independientemente de las genealogías.

-¿Y este precioso y amplio catálogo de la exposición que lleva el emblema del Ayuntamiento?

-Eso es cosa del artista, el Ayuntamiento solo cede el espacio y, ya te digo, de una manera excepcional porque la Casa de Vacas se abre poco.

Acto seguido llama la concejal técnica del distrito Estrella Ruiz para dar más explicaciones: "No es fácil llenar Casa de Vacas y nos habían pedido ese espacio para esta exposición con anterioridad. Casa de Vacas tiene la agenda cerrada para todo el año y no todo el mundo tiene capacidad para un montaje como el que se requiere: transportes, seguros, edición de catálogo...".

"Raíces del desarraigo podría interpretarse en clave de capítulos o episodios que, en su visión panorámica, muestran la historia del conjunto de los seres humanos que en la actualidad viven desamparados e indefensos ante la adversidad social que azota sin cesar a todos los países de cualquiera de los hemisferios", escribe Asúa, en el bonito prólogo del catálogo elaborado para la ocasión y que incluye textos de Rafael Doctor, ex director del MUSAC (Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León), y de Carlos Marzal (Premio Nacional de Poesía 2002), entre otros.

Rablaci convierte esos árboles mutilados en grandes esculturas, en metáforas de cuerpos heridos (con clavos incrustados), atados (con cuerdas), encadenados (con cadenas)... invirtiéndolas, para conseguir precisamente esa corpulencia raquítica y grandiosa. "Me interesan los temas que tienen que ver con la pérdida de la identidad en un mundo a la vez globalizado y saturado de información", comentaba Rablaci, que define su obra como "existencialista" y se dice seguidor de la filosofía de Nietzsche, Heidegger y Sartre.

Acompañando a las grandes esculturas, hay fotografías de gran tamaño realizadas por él mismo que nos muestran esas obras arbóreas en el que antaño fuera su lugar natural, los campos de naranjos valencianos, y donde pierden más, si cabe, la que fuera su propia esencia hasta el punto de evocar paisajes africanos de baobabs.

En quinto curso de Bellas Artes en la facultad de Altea (Alicante), Rablaci ha participado en varias exposiciones colectivas en el IVAM, lo que no ha pasado inadvertido para algunos blogueros levantinos que le han criticado por las posiciones que ocupan sus padres: "Consuelo Ciscar lanza a su hijo como artista", titulaba en octubre de 2009 un blog llamado Ex amics de L'Ivam; o "Consuelo Ciscar pone el IVAM al servicio de su hijo", titulaba el periódico digital El plural.com.

Obra de Rablaci en la exposición <i>Raíces del desarraigo.</i>
Obra de Rablaci en la exposición Raíces del desarraigo.P. O. D.

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Sobre la firma

Patricia Ortega Dolz
Es reportera de EL PAÍS desde 2001, especializada en Interior (Seguridad, Sucesos y Terrorismo). Ha desarrollado su carrera en este diario en distintas secciones: Local, Nacional, Domingo, o Revista, cultivando principalmente el género del Reportaje, ahora también audiovisual. Ha vivido en Nueva York y Shanghai y es autora de "Madrid en 20 vinos".

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