Una juez protesta porque Alhaurín deja de recibir presos por la noche

La magistrada Isabel Tobeña, responsable del Juzgado de Instrucción número 13 de Málaga, se ha plantado ante la decisión de la cárcel de Alhaurín de la Torre de dejar de recibir internos a partir de las ocho de la tarde. Lo ha hecho con un escrito en el que asegura que esta decisión puede vulnerar los derechos constitucionales de los detenidos, que deben ingresar en prisión en cuanto se acuerde esta medida.

Durante sus guardias, la juez Tobeña hace todo lo posible para que ningún preso sobre los que dicta ingreso en prisión duerma en los calabozos de la Ciudad de la Justicia malagueña, donde las condiciones no son adecuadas. No siempre lo consigue. La noche del martes 11 de enero cuatro detenidos por tráfico de drogas tuvieron que pernoctar en los calabozos.

Las reclamaciones de esta juez han abierto un debate con Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior. Este organismo reconoce "disfunciones" y esgrime que la cárcel de Alhaurín es la única de todo el país que recibe presos en horario nocturno. Además, Interior desaconseja los ingresos en estas franjas horarias "por motivos de seguridad".

Los detenidos de Málaga dejaron de ingresar en prisión por la noche el pasado marzo, tras un acuerdo rubricado entre Instituciones Penitenciarias, Guardia Civil y Subdelegación de Gobierno. "Faltó consensuarlo con los jueces", coinciden varias fuentes. "Ahora se producen ingresos por la noche, pero no de forma masiva", aseguran en el sindicato Comisiones Obreras.

Según datos de esta formación, un 58% de los 14.000 ingresos de personas antes libres que recibe cada año la prisión de Alhaurín se tramita en horario nocturno. "A esas horas, en las que hay menos funcionarios trabajando, no se les puede prestar un buen servicio y el Estado tiene que garantizar que se haga un buen traslado y un buen ingreso", incide Juan Carlos Blanco, representante de los funcionarios de prisiones de CC OO.

En la Guardia Civil hablan de descoordinación y falta de efectivos. "Los juzgados avisan a las 20.00 para hacer un ingreso y a las 20.15, notifican otro (...) Se tienen que detraer patrullas destinadas en labores de seguridad ciudadana para hacer los traslados", relata un agente encargado de estas tareas.

Según fuentes judiciales, el centro penitenciario permite el ingreso de detenidos después de las 20.00, en situaciones excepcionales. "Se están haciendo esfuerzos para llevarlos antes de esa hora, pero se sigue creyendo que lo más adecuado es que vayan directamente allí", explican. Una vez que los internos ingresan les aplican un protocolo, en el que se incluyen exámenes médicos y pruebas encaminadas a prevenir suicidios.