Educación recopila cien testimonios de víctimas para los estudiantes vascos

Más testimonios de víctimas -incluidos algunos del GAL-, sentencias judiciales, más elementos audiovisuales y una mayor adaptación a la edad de los escolares. Esas son las novedades de la actualización de los dos materiales existentes desde la pasada legislatura para educar en la empatía contra la violencia.

Los renovados materiales Bakerako Urratsak e Historias que nos marcan fueron presentados ayer por la consejera de Educación, Isabel Celaá, y los responsables de la tarea, Xabier Etxebarria -que también ha formado a las víctimas que acudirán de forma presencial a las aulas- y Jesús Prieto. Todos ellos podrán ser utilizados, junto con los materiales disponibles en la web de Eskola Bakegune, en la asignatura de Educación para la Ciudadanía.

Los materiales explican cómo 'acoger' a una víctima en el centro

La propuesta explícita de simular un zulo ha sido eliminada

Entre los diferentes canales por los que Educación transmitirá a los centros los testimonios de víctimas, la consejera contabilizó ayer que ya cuentan con un centenar de ellos. Los dos materiales presentados ayer también incrementan las voces que explican su experiencia como víctimas, llegando hasta el doble en el caso de Historias que nos marcan.

Entre los cambios también salta a la vista lo que falta: la referencia expresa a simular un zulo en la actividad relacionada al testimonio de Jaime Caballero, secuestrado por ETA. Jesús Prieto reconocía ayer a EL PAÍS que se había evitado utilizar esta propuesta debido a la polémica que suscitó. Los materiales la dulcifican y únicamente hablan de reproducir algunos aspectos del secuestro, como la penumbra o los cuchicheos que Caballero escuchaba de sus secuestradores.

Ambos materiales transitan por la senda de lograr la empatía y fomentar la reflexión y el debate para terminar pidiendo un compromiso al alumnado hacia las víctimas.

Etxeberria incidió en que, trabajando de este modo, la empatía hacia las víctimas y la deslegitimación de la violencia en las aulas, se salda una deuda de la escuela vasca. Y es que, a su juicio, estas actividades suponen evitar el "arrinconamiento educativo" de las víctimas, "porque el vacío anidaba una injusticia" dentro de la "universalidad de las víctimas" que se mostraba hasta ahora en los colegios. "Las víctimas no son adoctrinadores partidistas", aseguró, al tiempo que explicaba que es el profesor el que controla el proceso de acercamiento de estas a los alumnos. Historias que nos marcan establece una serie de pasos para llegar a este punto, como establecer un acompañante, al que se deberá preparar, para que esté en todo momento junto a la víctima. Etxeberria aseguró que los afectados "asumen el riesgo" de la respuesta en los colegios.

En la actualidad los profesores de más de 50 centros se están formando, desde hace dos meses. No será hasta que esta formación termine cuando las víctimas comiencen a acudir a las aulas de forma presencial, según explicó en conversación con este periódico el profesor de Deusto Xabier Etxeberria. Esto ocurrirá, según calculó, durante el tercer trimestre del curso.

Etxeberria defendió la presencia de las víctimas en las aulas porque "los aspectos de la violencia y la paz se aprenden cuando somos impactados por las víctimas, y eso sólo pasa cuando son ellas mismas las que cuentan su experiencia".

Historias que nos marcan muestra los testimonios de víctimas de ETA y el GAL, pasando por el testimonio de personas heridas en atentados, como Irene Villa que perdió sus piernas a los doce años a causa de una bomba, el de familiares de víctimas, de personas que fueron secuestradas o extorsionadas, etarras asesinados por su banda o de víctimas que por el azar resultaron dañadas en un atentado.

Bakerako Urratsak se divide en nueve pasos con material audiovisual, ejercicios para evitar los estereotipos y otras muchas dinámicas, como la creación de un periódico escolar con esta temática.