La televisión con Internet se impondrá

No es casualidad que para la sesión de apertura de la feria de consumo electrónico de Las Vegas, el CES, su máximo responsable, Gary Saphiro, se acompañase del consejero delegado de Verizon, la mayor operadora de banda ancha terrestre y móvil de Estados Unidos, Ivan Seinderberg. Durante la sesión dejaron claro que los aparatos de electrónica de consumo ya no tienen sentido sin Internet. Y la Red sin dispositivos, tampoco. Esta simbiosis está dando como resultados contenidos de mejor calidad, pero también más pesados de transportar. "Si el usuario demanda mejor calidad en los aparatos ha de disfrutarlos sin demora", insistió el responsable de Verizon. La ceremonia estuvo llena de optimismo.

Las cifras del sector son como para celebrarlo. Las previsiones, también. El año pasado, la industria de los aparatos de consumo creció un 3,5% y generó un volumen de negocio de 186.000 millones de dólares (143.000 millones de euros). En 2014 habrá en EE UU más de 30 millones de televisores conectados a Internet y 185 millones en todo el mundo.

Saphiro bautizó a los asistentes como tecnocapitalistas. "Durante estos días vamos a espolear al sector para mejorar la economía", subrayó. Sin rubor alguno aprovechó para recomendar su libro The Comeback, que trata sobre cómo la tecnología creará un nuevo sueño americano. La demanda de una mejor conexión móvil tiene que lograr que lo que ahora solo es un reclamo de mercadotecnia se convierta en realidad. Verizon se comprometió a dar infraestructura 4G (telefonía de cuarta generación) en todo el país cuanto antes. Esta nueva tecnología proveerá datos a una velocidad de hasta siete megas por segundo y permitirá hablar y navegar al mismo tiempo. Hasta ahora, cuando entraba una llamada, la conexión de datos se cortaba para poder atenderla.

Además de las tabletas y los teléfonos, esta edición del CES tiene una triunfadora renovada, la televisión. En 3D o alta definición, el aparato del salón no tiene sentido sin su integración en la Red. No solo a través de las aplicaciones, sino también de los contenidos en línea.

Gary Saphiro e Ivan Seindenberg mostraron algunas de las compañías de medios implicadas en crear el entretenimiento que está por venir: Time Warner, HBO y Turner. Confían en que pronto se sumen más para hacer "que todos los contenidos estén disponibles en cualquier aparato y cualquier momento".

Antes de abrir las puertas, muchas compañías organizan sus propias ceremonias de presentaciones. Google lo hizo para promocionar una versión del sistema operativo Android expresamente pensado para las tabletas. Se llama Honeycomb (panal). Tiene una librería digital que recuerda a las de Apple y Amazon; versión el correo Gmail para estos dispositivos y la integración de Gtalk que permite hacer videollamadas. Eso sí, las tabletas deberán disponer de cámara frontal para ello. Uno de los primeros fabricantes que saldrán al mercado con este nuevo Android es Motorola con su tableta Xoom.

Microsoft hizo un doble anuncio. Por un lado, el sistema operativo Windows no acompañará siempre a la arquitectura de los procesadores Intel. Su oferta tendrá soporte para arquitecturas basadas en sistemas ARM con la que trabajan fabricantes como Qualcomm, Nvidia o Texas. Con ello, Microsoft quiere ampliar el abanico de dispositivos que puedan emplear su sistema operativo.

El presidente de Microsoft, Steve Ballmer, fue el encargado de dar buenas noticias sobre la penetración en el mercado del mando gestual para la consola Xbox, el Kinect. "Dijimos que venderíamos cinco millones de Kinects... en los primeros 60 días. Vendimos ocho millones", informó en una conferencia a la que la empresa invitó a este diario. Este año, Kinect aportará una mejora: la introducción de avatares. El jugador podrá crear su retrato digital y participar con él en reuniones virtuales. El avatar lo controlará con los movimientos de su propio cuerpo. En CES, Ballmer mostró su propio avatar.