Los agentes inmobiliarios denuncian la restricción del crédito

La "política restrictiva" de las entidades financieras a la hora de dar créditos ha frustrado muchos intentos de compra de vivienda durante el pasado año, según denunció ayer el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (COAPI) de Valencia. A partir de los datos recabados entre sus miembros en la ciudad y en la provincia, el colegio estima que el 81% de las operaciones fueron rechazadas. Moisés Sansaloni, portavoz y vicepresidente del colegio, habló de una "mala praxis" de una parte de los bancos y cajas porque, a su juicio, "cercenan la libertad de comprar".

Según Sansaloni, la tardanza de algunas entidades financieras en contestar a las solicitudes de crédito pone en riesgo los contratos de arras y limita la capacidad del comprador de consultar a otros bancos. Además, el hecho de que las entidades necesiten vender su propio activo inmobiliario condiciona la concesión de préstamos y puede conducir a casos de "discriminación" de clientes que piden el dinero para pisos buscados en el mercado, criticó Sansaloni.

Bajada real del 21,6%

El colegio criticó también las últimas medidas fiscales en materia de vivienda, que considera que desincentivan la compra. Todo ello, en un "buen momento para comprar" piso pese a la crisis en el caso de que se tenga financiación, en opinión del COAPI. En el último año los propietarios que han querido vender en Valencia y su provincia han asumido de media una bajada del 21,6%. Una diferencia entre el precio inicial y el real de venta que es similar al de los últimos dos años de crisis, frente al margen de negociación de poco más del 1% en circunstancias de equilibrio entre oferta y demanda.

El precio de salida de la vivienda cayó un 4,52% en 2010, una bajada calificada por Sansaloni de "suave, de nivel de aterrizaje". Así, desde el cuarto trimestre de 2007, el mercado de Valencia y la provincia ha sufrido una bajada acumulada del 21,13%, lo que sitúa los precios a niveles de 2005 y los hace "muy competitivos", según el presidente del colegio, Ángel Sánchez, que confía en que ahora se "estabilicen".

La zona del Ensanche-Gran Vía en Valencia sigue siendo la más cara, con un precio de 3.369 euros por metro cuadrado; la más barata es Patraix-Olivereta, con 1.826 euros. El municipio de la provincia con precios más altos es Alboraia, con 2.547 euros el metro cuadrado, y el más barato Xàtiva, con 1.209.