El Parlamento respalda impedir una sucesión fraudulenta de Batasuna
Rufi Etxeberria alimenta expectativas sobre un final "integral" de ETA
El debate y pronunciamiento del Parlamento en apoyo del Gobierno Zapatero para que impida una hipotética sucesión fraudulenta de la ilegalizada Batasuna, en forma de nuevo partido de la izquierda abertzale, coincidió ayer con la primera entrevista en Radio Euskadi desde el cambio en EITB a un miembro de la antigua dirección de la formación proscrita.
En vísperas del anunciado comunicado de ETA, Rufi Etxeberria no reservó grandes titulares para una reaparición mediática que ha provocado sus más y sus menos entre los integrantes del pacto para el cambio, y la crítica de UPyD. Reiteró el discurso y la expresión de deseos respecto a ETA que ha ido madurando desde hace un año la izquierda abertzale en sus comparecencias públicas y se mostró convencido de que el comunicado de la banda será "una respuesta positiva" al emplazamiento de la Declaración de Bruselas y del Acuerdo de Gernika y que satisfará las demandas de ambos. Sin embargo, eludió concretar qué hará la izquierda abertzale si no cubre expectativas y se limitó a señalar que le insistirá a la banda. Y también al Gobierno español, precisó.
El PP, molesto por la entrevista a Etxeberria en la radio pública vasca
Egibar vaticina su fin al Gobierno con Batasuna de vuelta a la Cámara en 2013
La noticia estuvo casi más en la realización misma de la entrevista, a costa del desacuerdo y el enfado del PP, al margen del contenido de ella. "No estamos de acuerdo, creemos un error que EITB dé altavoz a la estrategia de Batasuna para presentarse ante los ciudadanos con piel de cordero", indicó a EL PAÍS su secretario general, Iñaki Oyarzabal, para quien el mensaje de Etxeberria resulta "inaceptable", tanto en su reclamación de negociación con ETA como en lo que consideró "falta de compromiso y concreción" sobre el alcance real de su apuesta.
La emisión de la entrevista contó con el visto bueno de las más altas instancias del ente, que priorizaron su valor periodístico en un momento en que la izquierda abertzale ha logrado que todo el mundo mire hacia el pronunciamiento de ETA y otros relevantes medios informativos han entrevistado a dirigentes significados, incluso encarcelados, como es el caso de este periódico.
Las consecuencias de esa decisión no pasarán de la expresión de desacuerdo por parte del PP. Ni la discrepancia ni la coincidencia en la fecha impidieron que el PSE y los populares concertaran un pronunciamiento común y mayoritario ayer, en la sesión plenaria de la Cámara, con la suma también de UPyD, en favor de la reforma de la ley electoral para taponar cualquier posibilidad de que Batasuna se cuelen en las elecciones de un modo fraudulento.
La transacción alcanzada entre ambos limó algo el lenguaje áspero del PP hacia el Ejecutivo central. En vez de "instar", el Parlamento se "reafirmó" en el respaldo al Gobierno de España en su lucha contra el terrorismo" y se mostró favorable a los acuerdos alcanzados en el Congreso para la reforma de la LOREG que tiene por objeto "cerrar cualquier vía para que los que no condenan ni rechazan la violencia ni aceptan las reglas democráticas puedan concurrir a las elecciones y acceder a las instituciones". La Cámara respaldará de modo especial al Gobierno "para evitar que se produzca una sucesión fraudulenta de los herederos de Batasuna en las elecciones previstas para el mes de mayo de 2011". Fue el texto aprobado con los 39 votos de PSE, PP y UPyD y los 36 en contra del resto de la Cámara. Egibar vaticinó el fin del Gobierno actual con la vuelta de Batasuna al Parlamento.
Precisamente en negar esa sucesión fraudulenta había puesto especial énfasis el ex dirigente de Batasuna en su entrevista. El partido que presentarán a finales de enero cumplirá la ley de partidos y, según dijo, la respuesta debe ser su legalización. Etxeberria insistió en que será "blanco sobre negro, un proyecto nuevo" y que "marcará un antes y un después", ya que ese nuevo partido "rechazará las expresiones de violencia" en caso de producirse. Ahí pareció querer anclar la negativa sobre esa espada de Damocles de la continuidad fraudulenta que previsiblemente escruten los tribunales.
Etxeberria fue especialmente explícito al admitir autocríticamente "la responsabilidad de la izquierda abertzale" en la ruptura de todos y cada uno de las ocasiones de negociación desde 1989. Esos fracasos "nos han servido de lección", asumió. El compromiso actual es para un proceso "integral", lo que incluiría la desaparición de la extorsión, señaló, además de "definitivo e irreversible".
La Cámara insta a evitar el cierre de Babcock
Todos los grupos del Parlamento, con excepción del PSE, aprobaron ayer una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno central a impulsar una mesa de negociación para evitar el cierre de la empresa vizcaína Babcock Power, ubicada entre Trapagaran y Sestao, y dedicada a los bienes de equipo. La firma se encuentra en peligro de quiebra por la insolvencia de A-Tec, el consorcio austriaco del que es propiedad.
La Cámara reivindicó "la mejor solución posible" para Babcock, que garantice los más de 1.000 empleos directos e indirectos que en la actualidad genera. La propuesta obtuvo el apoyo de UPyD, EB, EA, Aralar, PP y PNV. La portavoz de esta formación, Estíbaliz Arnaez, opinó que el Ejecutivo tiene que implicarse en la búsqueda de nuevos empresarios que se comprometan con la viabilidad industrial de la firma y acusó al PSE de "echar balones fuera".
La iniciativa recalca que la factoría se encuentra "en una comarca ya de por sí industrialmente muy castigada por los sucesivos procesos de reconversión que ha sufrido", ante lo que muestra la solidaridad y el apoyo del Parlamento "a las justas reivindicaciones de la plantilla". Los socialistas, en cambio, votaron en contra al recordar que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) no es ya propietaria de la compañía "ni lo volverá a ser".
Durante la intervención del portavoz socialista, José Antonio Pastor, se vivieron los momentos más tensos. Varios trabajadores de Babcock que seguían el debate desde la tribuna comenzaron entonces a proferir gritos en contra del cierre de la empresa que obligaron a intervenir a la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, que ordenó su expulsión. En el exterior de las instalaciones se concentraron también algunos empleados para exigir soluciones y cargar verbalmente contra la SEPI, que privatizó la firma.
Fuentes del comité de empresa avanzaron ayer, además, que el próximo día 21 la plantilla se concentrará en Bilbao, con motivo de la celebración de Santo Tomás, para reclamar la continuidad de la factoría. En declaraciones a Europa Press, los representantes de la plantilla resaltaron que Babcock tiene "instalaciones suficientes como para seguir teniendo trabajo", pero matizaron que hace falta "una gestión capaz y un empresario que aporte capital".
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