Marta recurre al abogado de Paquillo

La letrada asignada al turno de oficio el jueves pasado en Palencia no asistió "en ningún momento" a Marta Domínguez. Ella no acompañó a la fondista mientras la Guardia Civil registraba su casa, le interrogaba durante ocho horas en la Comandancia, y decidía, finalmente, que pasaba de considerarla testigo, según la atleta, a dejarla en libertad con cargos. Entonces, ¿quién le aconseja?, ¿quién se ocupa de su defensa en el complejo caso judicial gestado tras la Operación Galgo, que, presuntamente, tendría derivaciones penales y deportivas? José Rodríguez, especialista en derecho deportivo, es ese hombre. La complejidad que puede alcanzar el caso, sin embargo, obliga a que la atleta, según pudo saber este diario, maneje "varias posibilidades" para apoyar a su abogado.

El letrado era presidente de la Asociación de Ciclistas durante la Operación Puerto

Rodríguez es el máximo responsable de la defensa de Domínguez desde el fin de semana pasado. Esta es la secuencia de hechos que actuará como desencadenante del trabajo del letrado: primero, la juez del número 24 de Madrid deberá convocar a la atleta a declarar, cosa que no había hecho ayer, después de que la magistrada se incorporase a su puesto de trabajo tras estar de baja. Luego, Domínguez conocerá los cargos que se le imputan -"si los hay", recalcan desde su entorno-. Y, finalmente, y en función de esas palabras de la juez, la atleta decidirá si incorpora a su equipo de defensa a algún especialista en derecho penal, como el que ya ha tanteado en un despacho de Palencia.

El historial de José Rodríguez, presidente de la Asociación de Ciclistas Profesionales cuando la Operación Puerto ("Apoyamos la investigación y que se condene a quien haya cometido cualquier actividad ilícita, sea quien sea", dijo entonces), refleja los casos más importantes de la lucha contra el dopaje en los últimos años. Es un auténtico especialista, aunque, hombre plural, su cartera de clientes y casos es de lo más variada.

Ha representado al marchador Paquillo Fernández, suspendido por tenencia de sustancias dopantes. También a la maratoniana Yesenia Centeno, que dio positivo por un esteroide anabolizante. Y de su despacho, como en los dos casos anteriores, surgió la estrategia por la que el ciclista Moisés Dueñas colaboró con la justicia: la Ley española antidopaje, el Código Mundial y el reglamento de la Federación Internacional (IAAF) contemplan una reducción de hasta el 50% de la sanción de los deportistas que colaboren con la investigación de delitos de dopaje. Se trata de atrapar a los muñidores de las tramas: a los médicos que consiguen los productos, a los farmacéuticos que se los proporcionan o a los vendedores que se lucran con la red de tráfico y consumo. Dueñas, por ejemplo, acabó señalando a su médico, y las palabras de Paquillo, supuestamente, habrían sido el germen de la Operación Galgo. Rodríguez, se concluye, es un letrado proclive a los acuerdos. El abogado, que fue ciclista, también representó a Alejandro Valverde. Conoce al dedillo los tres procesos penales con deportistas implicados en España: Puerto, Grial y Galgo. Y su entorno, que le describe como un hombre "que escucha", resume su filosofía: "El deportista siempre tiene la última palabra".