Un sondeo de la Diputación da ganador a Olano con poco margen sobre el PSE

El PNV ganaría las elecciones forales en Guipúzcoa del próximo mayo con 14 escaños, aunque muy lejos de la mayoría absoluta (26 puestos) y con un estrecho margen sobre los socialistas, que obtendría 13 junteros. De producirse el regreso electoral de la antigua Batasuna, obtendría nueve representantes, mientras que Hamaikabat (H1!), actualmente en el Gobierno foral, perdería los siete junteros actuales. Los datos corresponden a un sondeo de la Diputación hecho público ayer.

El estudio sobre la intención de voto en el territorio, realizado por las empresas Aztiker y Logikaline tras encuestar a 3.263 personas entre el 13 de octubre y el 5 de noviembre pasados, sitúa a ocho formaciones en las próximas Juntas Generales.

El PNV, pese a bajar de 16 a 14 puestos, recuperaría, con el 24,2% de los votos, el primer lugar que perdió en 2007. Los socialistas, que ganaron las forales hace tres años por apenas 5.000 votos, serían ahora la segunda fuerza (21,2%) y perderían tres de sus 16 representantes actuales. La izquierda abertzale, a la que se ha incluido en el sondeo pese a no concurrir en esta provincia desde 1999 por su ilegalización, lograría el 16,1% de los votos y nueve procuradores. Euskal Herritarrok (EH) obtuvo entonces 14 escaños (el 28%).

Sin coaliciones

La Cámara foral se completaría con el PP (conserva sus seis junteros), Aralar (cinco representantes, tres más que ahora), EA (tres) y EB (uno). Hamaikabat sólo conseguiría el 1,48% de los votos y se quería sin representación. Alternatiba tampoco lograría ningún procurador.

En los comicios a los Ayuntamientos, el PNV también sería la fuerza más votada (22,8%), seguido por el PSE (21,1%), Batasuna (17,9%) y el PP (12,8%).

Casi la mitad de los encuestados (el 44,5%) rechaza cualquier tipo de coalición entre las mencionadas fuerzas y se decanta por los acuerdos puntuales. La alianza mejor valorada es la que uniría a peneuvistas y socialistas, con un apoyo del 13,5% de los encuestados.

El informe vuelve a poner de relieve la opinión negativa que los guipuzcoanos tienen de la clase política, a la que vinculan con intereses particulares, dinero y corrupción o partidismo. Puntúan la gestión del diputado general, Markel Olano, con un 5,03, mientras que al lehendakari, Patxi López, le califican con un 4,34. Sin embargo, López es conocido por el 90% de los encuestados, mientras que sólo la mitad identifica a Olano.