Mariona Carulla presidirá el Orfeó

Mariona Carulla (Barcelona, 1944) se alzó anoche con la victoria en las elecciones a la presidencia del Orfeó Català con 579 votos frente a los 260 obtenidos por la candidatura encabezada por Enric Enrech (Barcelona, 1947). Las elecciones, las primeras democráticas que recuerdan los socios, se celebraron en el Petit Palau en el transcurso de una asamblea convocada por la entidad a tal efecto y obtuvieron una alta participación. Había 1.668 socios con derecho a voto del total de 1.770 con que cuenta la entidad propietaria del Palau de la Música. De estos, votaron 920, aunque tuvieron que anularse 61 votos por correo ya que no estaban suficientemente identificados. Hubo 18 votos en blanco y dos nulos.

Carulla, que, al igual que su contrincante, antes de iniciarse las votaciones dirigió durante 10 minutos un parlamento a los socios pidiendoles el sufragio, fue proclamada tras el recuento de votos presidenta de la nueva junta de gobierno del Orfeó Català, la primera salida de las urnas de la era pos-Millet.

Fue una jornada electoral muy larga en la que el escrutinio se prolongó hasta las dos de la madrugada.

Carulla, hija del empresario Lluís Carulla, fundador del grupo Agrolimen, ha ocupado durante 15 meses la presidencia interina del Orfeó sustituyendo a Fèlix Millet, saqueador confeso de la entidad, en el cargo tras ser apartado este de la institución. Carulla, que fue durante 15 años vicepresidenta de la junta gobernada por Millet, ha explicado que se presentó a las elecciones para completar en los próximos cuatro años el "proyecto de renovación del Orfeó" que ha iniciado en los últimos 15 meses junto al director general de la institución, Joan Llinares, nombrado tras la expulsión de Millet. "Tengo mucho interés en dejar arreglado el Palau", manifestó la nueva presidenta.Carulla prevé culminar la reorganización del Orfeó simplificando la estructura jurídica, con cuatro entidades conviviendo en el Palau de la Música: el consorcio integrado por las administraciones que los rigen (Generalitat, Ministerio de Cultura y Ayuntamiento de Barcelona), la fundación a través de la que se recaudan fondos de patrocinadores, la asociación Cor de Cambra del Palau y la asociación Orfeó Català. La nueva presidenta, de acuerdo con las Administraciones públicas, prediseñó en su etapa como responsable interina de la institución que acaben siendo solo dos las entidades que controlen el Palau, la asociación Orfeó, matriz y propietaria del Palau de la Música, y una fundación diferente a la existente, que será la que gestionará la entidad.

Además de Carulla como presidenta, la nueva junta está integrada a partir de hoy por el ex director general de Caixa Catalunya Josep Maria Loza y el director de orquesta Antoni Ros Marbà en las vicepresidencias primera y segunda, respectivamente; los puestos de secretario primero y segundo los ocupan el ingeniero Jaume Martí y el notario Carles Cuatrecasas; el fundador de la constructora Emte, Carles Sumarroca, es el tesorero; Joaquim Borràs, archivero jefe del Ayuntamiento de Barcelona, es el archivero bibliotecario, y como vocales figuran Emilio Álvarez, galerista y director del Festival Loop, Alfredo Bassal, presidente de Active Venture Partners, Marta Maragall, ex directora de la Sala Parés, Joan Oliveras Bagués, joyero y empresario, Glòria Renom, diputada de CiU en la legislatura que ha acabado y número 19 en la candidatura de la coalición nacionalista para la eleciones del 28 de noviembre, Teresa Rumeu, arquitecta, Marta Solé, responsable del programa Parlem de Drogues de la Fundación La Caixa, Joan Manuel Soler, presidente de Quadis, Joaquim Uriach, del grupo farmacéutico Uriach, y Aleix Viadé, realizador cinematográfico.

La nueva junta de Orfeó se completará con los cuatro representantes del coro principal de la entidad, uno de los cuales ocupará la vicepresidencia tercera, cuya elección los cantores deben repetir en los próximos días después de que anteayer la mesa electoral anulará las elecciones internas celebradas el pasado 16 de noviembre, porque entre los que votaron figuraban algunos que no tenían los dos años de antigüedad como asociados que exigen los nuevos estatutos aprobados el pasado julio.

La jornada de ayer fue larga y pesada. Durante su intervención previa a las votaciones, el candidato derrotado, Enric Enrech, basó su discurso, además de en los ataques a la junta que hasta ahora ha dirigido Carulla, en acusar de "ilegal" la mesa electoral por considerar que se había hecho por elección de la anterior junta interina y no por sorteo como establecen los nuevos estatutos. De sus palabras se desprendía que, en caso de perder las elecciones, podría impugnarlas.