El Sabadell se muestra "abierto"a operaciones conjuntas con BBK y Kutxa
El banco no cerrará ninguna de las 120 oficinas tras comprar el Guipuzcoano
A BBK le siguen saliendo novios. El presidente del Banco Sabadell, José Oliu, aseguró ayer en Bilbao que su entidad se muestra "abierta" a trabajar de manera conjunta con la primera caja vasca, asi como con Kutxa, "si en el futuro se presenta un proyecto que tenga sentido". De hecho, las dos entidades de crédito ya son en cierta medida socias del Sabadell, al formar parte del accionariado del Banco Guipuzcoano, que la entidad catalana ha pasado a controlar. Aunque su participación es pequeña -tras el canje de acciones BBK tendrá el 1,086% y Kutxa, el 0,739%- las dos cajas de ahorro han trasladado al banco su intención de permanecer en su accionariado, al menos por el momento. La conversión del 100% de las acciones del Guipuzcoano en los correspondientes títulos del Sabadell se producirá a partir del día 24.
La entidad se plantea operar con la misma marca en Navarra y La Rioja
Lo novedoso del planteamiento de Oliu es que abre una posibilidad que no se estaba dando en el proceso de concentración de entidades financieras. Si hasta ahora los bancos se aliaban preferentemente con los bancos y las cajas con las cajas, la propuesta del máximo mandatario del Sabadell pasa por ir un poco más allá y si se tercia, crecer también en función de colaboraciones entre unos y otros. Oliu auguró que "habrá bancos regulados por cajas" de ahorros que deberán acudir a los mercados de capitales y "ceder parte de su capital".
Es en esa línea es en la que el responsable del banco catalán enmarcó la posibilidad de abordar operaciones con las cajas vascas. Apuntó que el mercado financiero va a experimentar en los próximos dos o tres años muchos cambios, por lo que resulta lógico estar "atentos para ver cuáles son las ideas que cada uno de estos actores pueden tener en el futuro", dijo refiriéndose a otras entidades. "El mundo está abierto" y es perfectamente posible "complementar de alguna manera" el proyecto del Banco Sabadell, "fruto de la recomposición del sistema financiero de cajas".
Oliu hizo esas reflexiones en Bilbao durante la celebración de la quinta Jornada BS de Negocio Internacional. Aunque a medio plazo todos los frentes se hallan abiertos, su objetivo a corto pasa por doblar la cuota de mercado en el País Vasco.
El banco partía con un "déficit de presencia" que la operación del Guipuzcoano va a ayudar a reducir. El Sabadell es ahora el sexto banco en el País Vasco, con una cuota de mercado situada en el 14% entre empresas y el 2,5% en particulares. A partir de ahora buscará reforzar la primera.
En Euskadi contará con 120 oficinas y no está previsto el cierre de ninguna sucursal, sino todo lo contrario. La idea es completar la red con algunas nuevas sucursales. En el resto de España la entidad tiene previsto cerrar 80 oficinas. Tampoco sobran trabajadores, por lo que no va a haber expedientes de regulación, aunque 150 empleados serán reubicados.
Una vez formalizada la primera fase de la compra del Guipuzcoano, el segundo paso se realizará entre finales de febrero y la primera quincena de marzo próximos, con la integración completa de los sistemas tecnológicos e informáticos, de la red de oficinas y la puesta en marcha de la nueva red comercial de la entidad.
Oliu precisó que todavía no se ha decidido todavía la marca diferenciada con la que se operará, pero precisó que las opciones que barajan son Banco Sabadell Guipuzcoano o mantener sencillamente la de Banco Guipuzcoano.
En principio, la idea es extender esta marca también a Navarra, mientras se está analizando la posibilidad de operar también con ella en La Rioja, aunque este último aspecto no se encuentra decidido. Oliu concluyó que Banco Sabadell presentará en enero su nuevo plan director para los próximos tres años, en el que se marcarán los objetivos comerciales.
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