Una muestra evoca la raíz onubense del fútbol español

Durante muchos años los aficionados tuvieron que conformarse con jugar en zonas más o menos llanas de la sierra pero no existía un lugar oficial. En 1935, por fin, se inauguraba, con gran expectación, un campo de fútbol, El Rebollar, en Galaroza (Huelva). El momento quedó registrado en una fotografía antigua que ahora se expone, junto a otras 40 imágenes, en el espacio cultural más vibrante del municipio onubense: La Taberna de Julio.

La asociación Lieva, que lleva más de 20 años agitando culturalmente la sierra, se encargó de recopilar las primeras fotos de fútbol de esta zona donde los británicos trajeron este nuevo entretenimiento, a finales del siglo XIX, cuando fueron a explotar las minas de Riotinto, a pocos kilómetros de Galaroza. La Taberna de Julio es una sala multiusos. Además del correspondiente vino y cerveza, se ha instalado una pantalla para audiovisuales y se ofrecen exposiciones y tertulias literarias. "Hemos querido traer la cultura a la taberna. Es el mejor punto de encuentro. Se aprende mucho con los más mayores", explica Antonio Tristancho, presidente de la asociación.

Las imágenes evocan aquellas tardes serranas en las que un nuevo deporte provocaba estruendosas subidas de ánimo o decepciones que llegaban a las lágrimas. Los ancianos del pueblo hasta reconocen a algunos jugadores. A todos los llaman por sus apodos: El Perla, El Bala, Chocolate o José Fernández, Changareto. Las fotografías fueron recopiladas por el nieto de uno de ellos, José Luis Lobo. Pronto algunos vecinos se animaron y buscaron en los armarios restos visibles de otros tiempos.

La fotografía más antigua, amarillenta, data de 1920. La imagen estrella, sin duda, es la inauguración del campo de fútbol en 1935. En un recorte del diario La Provincia, también expuesto, se narra lo sucedido aquel 26 de julio: "A las seis en punto salta al campo el equipo visitante y su presencia es acogida con grandes aplausos; minutos después lo hace el equipo local, que es acogido con una estruendosa ovación". Aquel día, los equipos de Galaroza e Higuera de la Sierra empataron a uno.