Villalonga entra en Hispania para buscar nuevos patrocinadores

Hace unos días Bernie Ecclestone, el gran patrón de la fórmula 1, aseguraba sentir "vergüenza" de algunos equipos, agobiados por los problemas económicos y con serias dificultades para mostrar su capacidad competitiva. De ellos llegó a decir que habría que echarlos del Mundial. Entre ellos estaba Hispania, propiedad del empresario español José Ramón Carabante. Ayer, la escudería con sede en Murcia anunció que el ex presidente de Telefónica, Juan Villalonga, entra en la estructura con un pequeño paquete de acciones y con un papel institucional. La idea es que este empresario que llegó a la cúspide de Telefónica de la mano del entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, y dejó la operadora en 2000 tras el escándalo de los planes de retribución del equipo directivo, ayude al equipo a "reforzar la habilidad de generar actividades innovadoras de mercadotecnia y patrocinio", según notificó Hispania en una nota. En otras palabras, que ayude a conseguir nuevos patrocinadores que inyecten dinero.

Villalonga, que ha vivido en Miami, se codea con hombres poderosos. Entre ellos está el propio Ecclestone, al que conoció hace ya una década cuando Telefónica entró en la F-1 como patrocinador de Minardi, equipo en el que daba sus primeros pasos Fernando Alonso. Después, la operadora siguió al español en su viaje a Renault, donde consiguió sus dos títulos en 2005 y 2006. Además de este acuerdo, que no se ha detallado, Hispania tiene otro, de tipo técnico, con Williams y negocia con Toyota para conseguir un nuevo chasis.