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El PNV elude el debate político con el 'lehendakari' en la sesión de control

Aralar se erige en defensor de la excarcelación de los líderes de Batasuna

En la primera sesión de control del Parlamento tras la firma del compromiso del PNV para apoyar los Presupuestos Generales del Estado a cambio del desarrollo estatutario, el PNV optó ayer por no interpelar al lehendakari, Patxi López, sobre ninguna de las cuestiones políticas de más rabiosa actualidad relacionadas de un modo u otro con ese hecho o con la evolución de la izquierda abertzale.

Llamativamente, y cuando tantas bazas tiene en sus manos el primer partido de la Cámara frente a López, elude la medición con él, en terreno supuestamente ganado de antemano, y prefiere dejar esa tarea al grupo minoritario de la oposición, Aralar, y a los parlamentarios únicos de UPyD, Gorka Maneiro, y EB, Mikel Arana. La única pregunta que ayer planteó al lehendakari el grupo que dirige Joseba Egibar versó sobre el clembuterol.

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Chuletón y clembuterol

El grupo peneuvista parece querer subrayar con esta actitud, que podría tomarse por desaprovechamiento, su desinterés por la medición con el lehendakari en la Cámara. Quizá porque quien se sitúa enfrente no será su contendiente como candidato o quizá también porque esos cara a cara los gana más frecuentemente, en esta Cámara y en todas, el Gobierno. Y también porque con el marcaje al que puede someterle desde el ejercicio de su influencia sobre el Grupo Socialista en el Congreso tiene suficiente.

Juega también el factor de que reivindicar el logro de las transferencias estatutarias pendientes puede no ser el terreno favorito del jefe de filas del PNV en el Parlamento.

El comportamiento de ayer es coherente con el observado en el pleno de política general. Egibar despreció también durante su intervención en ese debate que abrió el curso político, el flanco que le ofrecía otro logro de su partido en el Congreso: el pleno se produjo nada más cerrar el PNV en Madrid el acuerdo para añadir las bonificaciones en las cuotas a la Seguridad Social al traspaso de las políticas activas de empleo, en lo que determinó el compromiso para sostener a Zapatero cerrado ahora. Egibar lo obvió.

Así las cosas, los cara a cara de la sesión de ayer fueron los de López con la parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, sobre el acuerdo de Gernika y, en definitiva, la política hacia la izquierda abertzale; con el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, el liderazgo en la negociación de las transferencias y con el de EB, Mikel Arana, por el acuerdo PSOE-PNV.

Ezenarro se enzarzó con López por su falta de movimientos, en correspondencia hacia los que, a su juicio, ya realiza de modo suficiente la izquierda radical. El lehendakari reivindicó que ha sido la firmeza democrática la que ha provocado esos cambios y defendió su obligación de mantenerla y "no equivocarnos ni dar pasos que nos hagan retroceder en lugar de avanzar". Ezenarro le mostró el riesgo real por la vía de su propia respuesta: el mero reconocimiento por López de que "la melodía suena distinta", provocó en la portavoz de Aralar una protesta por la detención de "un montón de jóvenes", en referencia a la operación policial de ayer contra Segi, en lo que levantó protestas sonoras en la bancada PP. Ezenarro avanzó más y se erigió en valedora de la libertad de los "presos políticos". "Si el señor Ares, el Gobierno central y hasta usted dicen que la música suena distinta, ¿qué hacen los líderes de Batasuna en la cárcel?" "Si dicen que lo novedoso es que asistimos a una lucha entre Batasuna y ETA ¿por qué permanecen de forma preventiva en la cárcel. Presos políticos, sí, señor López ¿o no son presos políticos esas personas?", enfatizó.

El lehendakari acusó a Ezenarro de estar asumiendo todos los planteamientos del mundo abertzale, le instó a pedir la desaparición de ETA, y a la izquierda abertzale a "entonar la música definitiva": pasar "de las declaraciones y entrevistas a los hechos u demostrar que rompen definitivamente con la violencia y trabajan para que desaparezca".

Urkullu, no; su partido, sí

El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, aseguró ayer que él no acudirá al acto de celebración del Estatuto de Autonomía previsto para el próximo lunes porque no está "para fiestas impuestas", pero ha asegurado que habrá una representación institucional de su partido.

En una entrevista concedida a TeleBilbao, recogida por Europa Press, Urkullu dijo que aunque ese día acudirá a la presentación de la tesis doctoral del ex lehendakari , Juan José Ibarretxe, a San Sebastián, le daría tiempo a acudir al acto del Estatuto, previsto en Lehendakaritza, porque "no coinciden" en horarios, pero ha asegurado que no lo va a hacer. "No estoy para fiestas impuestas", subrayó.

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