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La Ertzaintza tardará más de un mes en acceder al ordenador de Zubiaurre

El informe pericial resulta clave para aclarar el espionaje en Industria

La Ertzaintza tardará todavía uno o dos meses en elaborar un informe pericial sobre el ordenador de Antton Zubiaurre, el ex director general de Sprilur, sociedad pública dependiente de Industria, imputado por el supuesto espionaje a altos cargos de esa consejeria. La titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao, Aurora Torres, esperaba disponer de ese informe inmediatamente después de las vacaciones de verano. Sus conclusiones resultarán determinantes para fijar la implicación en los hechos de Zubiaurre y de I. U., actual emplado de la SPRI, entidad de la que de pende Sprilur, y su ex chófer personal, los dos imputados en la causa abierta.

Fuentes judiciales atribuyen la demora en la realización del informe a las dificultades técnicas para acceder a los datos. Los agentes encargados de la investigación deben clonar los discos duros del ordenador personal de Zubiaurre, incautado junto al del otro imputado, el pasado 25 de junio. Esta operación es habitual en este tipo de investigaciones, ya que los ordenadores originales se deben mantener intactos y el trabajo se realiza sobre los copias. Todas estas labores requieren tiempo, lo que explicaría el retraso.

Los investigadores deben clonar los discos duros del ex director de Sprilur

Los agentes van a cruzar los datos que obtengan con los guardados en los terminales de los altos cargos de Industria supuestamente espiados, principalmente el director técnico de Sprilur, Pedro Garcia. La investigación apunta a que la vigilancia se realizaba desde el exterior con programa instalado en los ordenadores de Sprilur y la SPRI antes de la llegada de los socialistas al Gobierno vasco.

Zubiaurre y su ex chófer se hallan en libertad con cargos. Se les acusa de un delito de descubrimiento y revelación de secretos, tipificado en el artículo 197 del Código Penal. En este caso se trataría de apropiarse de información de otras personas de índole económica para suministrarla a terceros, lo que puede suponer hasta cinco años de cárcel.

Hasta ahora, las principales pruebas contra Zubiaurre son las denominadas IP -siglas en inglés de Protocolo de Internet-, los identificadores de cada ordenador que sirven para conectarse con otros. En las diligencias figuran varios identificadores del ordenador personal del ex director general de Sprilur y uno del otro imputado, igualmente de su terminal personal, según las fuentes consultadas.

A diferencia de los móviles, cuyo rastreo resulta más fácil, los ordenadores no tienen una IP fija, y varía debido al ingente número de terminales que se conectan a diario a la red. Solo si un usuario lo pide y paga por ello dispone de un identificador con un número fijo, lo que no ocurre en el caso de los dos imputados. Por ello, precisar desde qué ordenador se accedió a la información interna de la SPRI resulta más complejo.

La titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao, encargado del caso, ha solicitado también un informe a Microsoft, el fabricante del sistema operativo de los ordenadores, para que determine si la información manipulada en los terminales de Industria procede de los de Zubiaurre e I. U.

Desde marzo

- El caso Zubiaurre se destapó el 25 de junio, aunque las investigaciones se remontan a marzo, tras la denuncia presentada por Industria, con la detención, en su domicilio de Mendaro de Antton Zubiaurre. Al enterarse de que le buscaban, acudió al juzgado el otro imputado, I. U.

- El 2 de julio, el juzgado levantó el secreto de sumario y pidió el informe de los ordenadores.

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