Puerta abierta a los viñedos

Con el otoño llegan las vendimias. El campo expone sus frondosas cepas cargadas de racimos a la mirada entusiasta del visitante. Y vibra con el trajín de vendimiadores, cajas, volquetes, tractores. El aire se carga de olor a parra y mosto, que compite con los balsámicos del pino y el perfume ligeramente punzante de las hierbas silvestres. Luego, los aromas frutales de la fermentación embriagarán con el gozo anticipado del vino. Una experiencia que se puede vivir de primera mano en bodegas con hotel.

Protagonista: la viña

Si en esta época del año se visitan los viñedos de La Rioja, Ribera del Duero, La Mancha o Penedés, es fácil que nos crucemos con viticultores que se dirigen a las bodegas con el remolque del tractor cargado de racimos. En La Rioja, y concretamente en Elciego, la villa alavesa donde nació la primera bodega riojana, se encuentra la expresión más prestigiosa del concepto bodega con hotel: Herederos del Marqués de Riscal(Torrea, 1. Elciego, Álava. 945 18 08 80. www.hotel-marquesderiscal.com. Desde 300 euros. Visita a bodega y degustación: 10 euros). Junto a sus históricas y renovadas instalaciones de elaboración y crianza, de 1883, se alza el portento arquitectónico creado por Frank O. Gehry. En armonioso contraste, las viejas prensas hidráulicas verticales y los grandes tinos de roble conviven con el titanio y las formas voladizas.

No tan lujoso pero con más prestaciones vitivinícolas, Bodegas Izadi (Herrería Travesía, 2. Villabuena, Álava. 945 60 90 86. www.izadi.com. 90 euros) incluye restauración y enoturismo dentro de un concepto integral. El hotel, de 11 habitaciones, está bien equipado, y el restaurante ofrece sabrosa comida regional. Pueden acordarse excursiones al viñedo para ver la vendimia, visita a las instalaciones de la bodega y catas.

Sin salir de La Rioja, hay otras opciones para dormir y comer rodeado de viñedos: La Hospedería del Vino, de Bodegas Puelles (Camino de los Molinos, s/n. Ábalos, La Rioja. 941 33 44 15. www.bodegaspuelles.com. 130 euros), con seis cuidadas habitaciones dobles, piscina-spa climatizada con vistas al viñedo y la posibilidad de disfrutar de catas comentadas. El nuevo hotel de la bodega Eguren Ugarte (carretera A-14, km 61. Páganos, Álava. 945 60 07 66. www.egurenugarte.com. 90 euros) tiene 18 habitaciones dobles y 3 suites con grandes ventanales a los viñedos y a la sierra de Toloño donde relajarse, comer y catar en un entorno de viñedos. Para comer disponen de un restaurante tradicional con un menú clásico que, por 39 euros, incluye visita a la bodega y cata de tres vinos.

Del Ebro al Duero

Vena enológica de la vieja Castilla, el Duero tiene sus riberas orilladas de magníficas ciudades y villas, como Quintanilla de Onésimo, en plena milla de oro de Ribera del Duero. A sus afueras se ubica una de las mejores, más completas y excitantes posibilidades de enotu-rismo: Bodegas Arzuaga (carretera N-122, km 325. Quintanilla de Onésimo, Valladolid. 983 68 70 04. www.hotelarzuaga.com. 160 euros). Sólida edificación que recuerda un convento con sus torres, arcadas y campanario. Piedra por fuera; madera de olmo por dentro. El hotel tiene 55 habitaciones. Aúna la elaboración y venta de vinos con la escapada por sus viñedos. En el recientemente inaugurado spa, con vistas al viñedo, destaca el tratamiento exfoliante con pepita de uva, la posterior envoltura en hollejos y, finalmente, el baño en vino tinto. La oferta, amplia y profesional, incluye visitas guiadas y talleres de cata.

Del Duero al Guadiana

La Mancha juega al escondite con el Guadiana. A escasos metros del río y a nueve kilómetros de Ciudad Real, tierra de pan, queso y vino, se encuentra la bodega-hotel Pago del Vicario (CM. 412, kilómetro 16. Ciudad Real. 902 09 29 26. www.pagodelvicario.com. 120 euros). Ubicado en medio de sus 130 hectáreas de viñedo, el hotel, obra del arquitecto Juan Sánchez, ofrece al visitante un espacio de calma y plenitud, que puede disfrutarse en sus 23 habitaciones. El restaurante, de amplios ventanales a la nave de barricas, ofrece una sabrosa comida de mercado. Hay más alicientes, como participar en seminarios de cata, practicar senderismo y distintos deportes.

'Glamour' catalán

A las faldas de Montserrat, cuna de la espiritualidad catalana, en un entorno natural de ensueño lastimosamente alterado por alguna edificación inoportuna, Can Bonastre (carretera B-224, kilómetro 13,200. Masquefa, Barcelona. 937 72 87 67. www.canbonastre.com. Entre 259 y 360, según el paquete) tiene la oferta de enoturismo más completa y seductora de España. Las instalaciones del hotel y bodega se ubican en una masía del siglo XVI rodeada de viñedos y bosques que pueden recorrerse a pie, a caballo, en bicicleta o contemplarse desde el aire. Un wine resort con encanto de 12 habitaciones dobles, exquisitamente decoradas, en el que se pueden realizar numerosas actividades deportivas, vitícolas, gastronómicas y culturales. La oferta, diferenciada por paquetes, es completísima, e incluye spa, con tratamientos de vinoterapia, cocina de vanguardia, talleres de armonización de vinos y platos, cursos de cata, y las obligadas visitas guiadas a la bodega.