Amenaza de multa a los padres de un colegio de Lugo

La Consellería de Educación activó el protocolo de absentismo escolar a los padres de 18 alumnos del colegio público Ponte de Doiras, en el municipio lugués de Cervantes, que desde el inicio del curso no envían a sus hijos a clase en protesta por la supresión del servicio propio de cocina. Los padres se sienten engañados por las autoridades educativas, ya que dicen haber recibido el compromiso, en el último día del pasado curso, de que el servicio de cocina se mantendría en este colegio de la alta montaña luguesa. Pero el pasado 10 de septiembre, coincidiendo con el inicio del curso escolar, se encontraron con otra realidad: la cocina estaba cerrada y la comida se elabora en otro centro educativo del mismo municipio (San Román) y se traslada en un vehículo.

Ante esta situación, los padres dijeron que por ahí no pasarían y decidieron no enviar a sus hijos a clase. Desde entonces, ya van 9 días sin actividad lectiva entre los que intercalan concentraciones, en días alternos, ante el centro educativo.

Este comportamiento fue lo que llevó a Educación a activar el protocolo de absentismo, del que ayer fueron informados los padres. "No procurar o impedir la asistencia de un niño o adolescente en periodo de escolarización obligatoria al centro escolar y sin causa justificada, cuando les sea imputable a los padres o tutores podrán ser sancionados con una multa de 1.502,53 a 6.010,12 euros". Ésa fue la notificación con la que se encontraron ayer, aunque no surtió ningún efecto disuasorio. "Nos intentan amedrentar, pero estamos más unidos que nunca. Que hagan lo que quieran", espetó Dolores Ramos, una de las portavoces de los padres.

"Ningún ahorro"

Los padres sostienen que el cierre de la cocina no supone "ningún ahorro" para la consellería, puesto que tuvieron que contratar una persona más en San Román para elaborar la comida, a lo que se añade el coste del transporte.

Por su parte, la delegada territorial de la Xunta en Lugo, Raquel Arias, confirmó  el inicio del protocolo por absentismo, e hizo un llamamiento a la "sensatez" por parte de los padres.

Arias hizo hincapié en que los alumnos de Doiras comerán "exactamente la misma comida" que la que se sirve en el colegio de San Román, que es donde se elabora y se transporta en un vehículo isotérmico, con un recorrido "que no dura más de 25 minutos".