Bruce Willis se deja ver en la cala de la Granadella

Hasta ahora parecía sólo una sombra. Se le había atisbado el lunes en el interior de un automóvil en el puerto de Moraira. Y el martes, según fuentes de la productora, estuvo rodando en un impresionante velero que navegaba frente al litoral de Xàbia. Pero por fin, y después de días y más días de dar esquinazo a fotógrafos y periodistas, el actor norteamericano Bruce Willis se dejó ver ayer en la cala de la Granadella de esa última población de la Marina Alta durante la grabación de unas cuantas secuencias de su última película, el trhiller The Cold Lihgt of Day, dirigida por el director de origen francés Mabrouk-El-Mechri.

Tampoco es que Willis se diera un baño de multitudes. Más bien, llegó, vio y se marchó. Accedió a la cala en un automóvil, fue trasladado bajo un paraguas junto a su doble y otros miembros del equipo en lancha y desde allí zarpó rumbo al velero, se supone que para seguir interviniendo en los diálogos que aclaren la complicada trama de The Cold Lihgt of Day, que narra el secuestro de Willis y de su esposa tras una conspiración que debe ser aclarada por el hijo de la pareja y verdadero protagonista de la película, Henry Cavill. Este último, popular por la serie televisiva de los Tudor, se ha dejado ver mucho más que Willis en el rodaje, que comenzó el pasado 6 de septiembre.

En Xàbia se han rodado las escenas más espectaculares, con continuas persecuciones que han tenido como telón de fondo sobre todo el mar y donde han intervenido, además del velero, varias lanchas, catamaranes y hasta motos de agua.