El mimo Tuga vuelve a la Puerta del Sol tras su retención policial

"Tuga con su permiso", decía ayer la pizarra del mimo de la Puerta del Sol. Reivindicaba su derecho a hacer un espectáculo de humor en la calle, después de haber sido retenido por la policía el día anterior. Un día después, el show continúa y aún lo hará hoy en triple sesión a partir de las nueve de la noche.

Unas 500 personas observaban, reían y participaban en la actuación. Vestido con un mono de mecánico rojo y la cara de un payaso poirret ofrece 40 minutos de humor. No parece diferente de otros mimos que actúan por la calle. Pero su espectáculo "invade la vía pública y la calzada" provocando una alteración del orden, según las fuentes municipales que explicaron los motivos de su traslado a las dependencias policiales de la calle Montera el pasado jueves.

El actor fue llevado a comisaría por "invadir la calzada" y alterar el orden

Cuando Rodolfo Meneses se pone la piel de Tuga no conoce barreras y paraliza el tráfico al atravesar en canoas o descapotables imaginarios los pasos de cebra. No pasa desapercibido. De ahí que la Policía Municipal le requiriese el jueves la documentación antes de iniciar el espectáculo. "Siete agentes me pidieron el pasaporte y que les acompañara a comisaría", explica el chileno. Sin abandonar el papel de mimo, permaneció cerca de 40 minutos sin mediar palabra. Trató de escribir en su pizarra, pero "ellos decían que eso no valía porque podía hablar". Explica que no quería salirse de su "personaje mágico" porque le permitía "estar tranquilo" en esa "situación de abuso de poder". Cuando finalmente cedió, le tomaron declaración y le soltaron. Él se negó a firmarla porque no estaba de acuerdo con lo que ponía. "Me han tratado como si fuera un delincuente o un terrorista y solo soy un payaso", protesta.

Un mando policial explicó que fue trasladado a la Unidad Integral de la Policía Municipal en la calle Montera para ser "identificado con tranquilidad", lejos del tumulto de personas que había acudido al kilómetro cero para ver su representación. Muchas de ellas acompañaron al artista mientras permaneció en las dependencias. Se quedaron fuera gritando su nombre y pidiendo que le liberaran.

El mimo salió de comisaría una hora después sin habla, como siempre que lleva el uniforme de Tuga, y con una denuncia en la mano por "contravenir la ley de espectáculos públicos" y por mantener una actitud "arrogante" y "despreciativa" ante las fuerzas de seguridad. Esos fueron los motivos de la denuncia, según leyó un miembro del público ante las cámaras de Cuatro.

La Policía Municipal ya sabía que iba a acudir a la Puerta del Sol, como había hecho toda la semana, porque así lo contó en una entrevista publicada en este periódico el pasado martes. El día anterior ya le habían llamado la atención. Un mando policial calificó la intervención de los agentes de "correctísima". Normalmente, la Policía Municipal disuelve las grandes concentraciones alrededor de mimos y estatuas callejeras de la Puerta del Sol porque atraen a carteristas y se producen más hurtos al descuido.

"Me dijeron que no podía volver a actuar nunca más aquí", asegura el mimo. Eso no le impidió continuar su actuación anoche. El público le animaba y él accedió, pero esta vez sin meterse en la calzada. "Los agentes patrullaban y se quedaban mirando, pero no hubo más problemas", relata Meneses. No es la primera vez que tiene problemas con la policía. Ya le pasó en Chile y en Argentina. "El permiso me lo dan esas 500 personas que se parten de risa con mi espectáculo", sentencia.

Mimo detenido en la Puerta del Sol