Interior suspende la búsqueda del 'ertzaina' desaparecido en Álava

Interior decidió a última hora de ayer suspender el operativo de búsqueda del ertzaina desaparecido el miércoles por la tarde en Valdegovía cuando realizaba una ruta en quad. Tras cuatro días completos de batidas infructuosas, la Dirección de Atención de Emergencias del departamento tomó esa decisión tras considerar que ya se ha peinado todo el terreno. El operativo de rastreo se volverá a poner en marcha si se hallan nuevas pistas del paradero del agente, José Félix Chasco, pero, de momento, solo la investigación continuará abierta por la Ertzaintza para buscar pistas de su paradero.

El cuarto día completo de una búsqueda que se inició el mismo miñercoles por la noche había comenzado ayer con una ampliación de la zona de rastreo. En torno a un centenar de personas, entre agentes de los distintos cuerpos policiales, berrozis (agentes de élite de la Ertzaintza), voluntarios y miembros de los equipos de rescate participaron en el dispositivo. Chasco, un agente vizcaíno de 47 años, salió a conducir su quad amarillo el miércoles por la tarde en el pueblo de Tuesta, perteneciente al citado término municipal alavés, donde veranea con su familia. El agente, casado y con dos hijos, comentó que iba a regresar a las ocho de la tarde. Sus familiares dieron la alerta horas después al ver que no volvía.

La zona de rastreo para localizar a José Félix Chasco se había ampliado ayer

La Dirección de Atención de Emergencias, dependiente de Interior, había extendido el rastreo a los municipios de Cuartango, Salinas de Añana y Pobes, con perros, motos, quads y coches, pero las pesquisas no dieron resultado en todo el día. La Guardia Civil también rastreó la parte de la provincia de Burgos más cercana a Valdegovía. Pese a que un principio se pensó en recurrir a los buzos de la Ertzaintza para que revisasen el embalse de Sobrón, finalmente no se requirió su presencia. Fuentes de Interior explicaron que no hay indicios de que el vehículo de Chasco cayese al agua.

Las dos únicas pistas existentes no han desvelado el paradero del ertzaina. La primera es el testimonio de un vecino que vio al agente hacia las siete de la tarde del miércoles en el pueblo de Gurendes. Este lugar se encuentra cerca de Peñarrubia, donde el jueves surgió la segunda pista: el móvil de Chasco fue registrado en el repetidor de este monte. La señal cesó el viernes y los equipos de búsqueda no han hallado ninguna pista en el radio que abarca el repetidor.

Ante la falta de resultados, los ánimos habían empezado a flaquear. Mientras que en los dos primeros días más de 200 personas buscaban al ertzaina, ese número se redujo el sábado a unos 140 y ayer, a un centenar. "No hay ni un derrape que nos dé pistas; al final es un poco desesperante", explicaba a EL PAÍS un joven que participó en las batidas durante los tres primeros días. Uno de los vecinos de Valdegovía que colaboró en el dispositivo resaltó que el rastreo estaba siendo muy exhaustivo: "Hemos pasado hasta 20 veces por algunas zonas para asegurarnos". "Tenemos una sensación de impotencia, porque ya no se nos ocurre dónde buscar", apuntaba, con todo.

Ya desde la medianoche del miércoles, después de que la familia denunciase la desaparición, voluntarios y especialistas buscaban a Chasco. En estos días se han peinado senderos secundarios e incluso otros sin salida. En ninguno se han encontrado pistas del paradero del agente. Un vecino del lugar apunta que la zona es boscosa, con montes cerrados y desniveles rocosos.