La Junta abrirá la bolsa de adopción de niños españoles tras 12 años

La Consejería de Igualdad y Bienestar Social abrirá a finales de año la bolsa de adopción de niños españoles, que permanece cerrada desde 1998. Las familias demandantes siempre superan a los niños susceptibles de ser adoptados, de ahí que la adopción internacional se mantenga, pero en 1998 se llegó a una proporción de diez familias por cada niño. Y ahora se abrirá para nuevas familias. "No queremos generar una expectación porque no hay más niños, pero es cierto que la lista de familias de hace doce años está envejecida", aclaró ayer la directora de Infancia y Familia, Teresa Vega.

La Junta busca ahora familias para 47 niños, 38 de ellos con necesidades especiales. En la comunidad existen 3.658 menores que conviven con familias de acogida, 2.944 de ellos con familia extensa (tíos o primos), mientras que los centros de protección de menores acogen a 2.758 niños andaluces. En total son 6.416 los niños tutelados por la Junta. La consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, subrayó en una entrevista con Europa Press que la mayoría de los menores susceptibles de ser adoptados son grupos de hermanos. "Esto supone una dificultad añadida porque no todas las familias están dispuestas a adoptar a grupos de hermanos".

Apuesta por la familia

La Junta prioriza que las familias acojan a los menores para evitar que estos pasen su infancia en un centro de acogida. Son estancias cortas o permanentes. "La apuesta por la familia es indiscutible y el acogimiento familiar tiene un presupuesto de 10 millones para la captación de familias y pagar el acogimiento a las familias", matizó Vega.

La normativa del sistema de protección provoca que la mayoría de los menores adoptados no sean bebés con menos de un año, que son los preferidos por las familias. Esa limitación, unida a que los trámites son más sencillos, impulsa a las familias a decantarse por las adopciones internaciones en países como Vietnam o Filipinas.

"El acogimiento familiar es una de las mejores formas de darle estabilidad emocional y seguridad a los menores", incidió Navarro. Gracias a este programa, los menores que ingresaron en centros de protección pasaron de 321 niños en 2008 a 224 en 2009.