Dos trabajadores mueren en un incendio en una refinería de Huelva

Un incendio en la refinería La Rábida, ubicada en Palos de la Frontera (Huelva) y propiedad de la compañía petrolera Cepsa, acabó ayer con la vida de dos trabajadores de 41 y 54 años que estaban empleados por sendas subcontratas para realizar obras en el recinto de la planta. Otros dos operarios -de 25 y 36 años- permanecían ayer ingresados con quemaduras y en estado grave.

El origen del fuego, que comenzó sobre las 12.45 y fue controlado casi tres horas después, se localizó en un rack (un punto de unión de tuberías) de la planta de tratamiento residual de aguas, a pocos metros de los tanques en los que se almacenan miles de litros de gasolina. Las cuatro víctimas trabajaban allí en esos momentos. En cualquier caso, la Junta de Andalucía ha abierto un expediente informativo y espera a recibir la información correspondiente de Cepsa para determinar y depurar las posibles responsabilidades sobre el siniestro.

Los servicios de emergencia andaluces trasladaron a uno de los heridos en helicóptero hasta la Unidad de Quemados del hospital Virgen del Rocío de Sevilla, pero ya habían pronosticado antes de introducirle en el aparato que moriría de forma casi inmediata a tenor de sus heridas, puesto que sufría quemaduras en el 95% del cuerpo. Así sucedió. Otro de los trabajadores se consideró en paradero desconocido hasta cerca de las cuatro de la tarde. Había fichado por la mañana a la entrada en la fábrica, pero no acudió al centro de reunión que se utiliza al activarse el plan interno de emergencia. Su cuerpo sin vida fue encontrado horas después.

Los otros dos empleados se hallaban ayer en estado grave, con quemaduras de gravedad en la cara y las vías respiratorias, según informó la Consejería de Salud de la Junta. Permanecían ingresados en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla, el centro andaluz de referencia para el tratamiento de quemaduras agudas.

La Delegación Provincial de Medio Ambiente aseguró que el incendio en la refinería "en ningún momento ha supuesto peligro alguno para la población de los municipios situados en el entorno de la refinería". "No se ha producido vertido alguno" que haya afectado a las aguas o el aire de la zona, ha añadido en una nota.

El accidente de ayer no es el primero que se produce en esta refinería de Cepsa. Hace aproximadamente un año se produjo un vertido de petróleo que afectó a las playas del espacio natural de Doñana. El escape tuvo lugar en la tubería de 10 kilómetros de longitud a través de la que un buque descargaba crudo a la planta.

La subdelegación del Gobierno en Huelva abrió entonces un expediente a la petrolera, a consecuencia del cual se ha visto obligada a modificar su sistema de tuberías. Estos cambios tienen un coste de 42 millones de euros, según informó ayer la propia subdelegación.