La prioridad de la BBK en Cajasur, el control del riesgo

La concentración de riesgo se antoja siempre como una amenaza latente para toda acción financiera y sobre todo en la actual coyuntura económica. A su control dedicará la cúpula de BBK buena parte de sus esfuerzos a partir de la adquisición de Cajasur, decidida el viernes por el Banco de España. Y es que el reconocido índice de penetración de la entidad andaluza, con una sólida implantación en el mercado de Córdoba y Jaén, especialmente, conlleva un alto índice de riesgo, como ha sido admitido por analistas financieros consultados.

La expansión de BBK había sido considerada "estratégica" por su presidente, Mario Fernández, para aumentar la cuota de la entidad. Con la adquisición de Cajasur, el objetivo queda alcanzado, pero en medios financieros no se olvida el efecto que pudiera suponer la amenaza que inicialmente se derive del "desgarro" en términos localistas por haberse perdido el control andaluz.

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De entrada, la existencia de 600 trabajadores en los servicios centrales de la caja andaluza se antoja elevada, aunque no se conocen todavía los planes sobre la plantilla. En medios sindicales se admite como "posible" que BBK proceda a un recorte "aunque controlando los tiempos". Sobre la incidencia social que podría tener un recorte de efectivos en Cajasur, las mismas fuentes consultadas por este diario coincidían ayer en reconocer que "parece obvio que se producirá y que siempre estará la justificación, si se produce el recorte, diciendo que peor hubiera sido la desaparición de la entidad porque entonces se perderían todos los puestos", agregó.

- Mario Fernández. El máximo responsable de BBK ha detallado las líneas generales de la operación a su equipo directivo. Para mañana lunes está convocado un encuentro de la dirección de BBK con los sindicatos, mientras por la tarde habrá otra reunión en Málaga con los representantes de la plantilla de la entidad financiera en las 31 oficinas de que dispone en Andalucía. También mañana, Fernández participa en un acto con el lehendakari, Patxi López.

- José Antonio Griñán. El presidente de la Junta afirmó ayer que Fernández le ha trasladado su intención de "conservar el mayor nivel posible de empleo y mantener la obra social en Córdoba". Griñán también aseguró que Fernández tiene previsto un encuentro con el consejero de Economía, Antonio Ávila, para informarle de sus planes en Andalucía.

- Javier Arenas. El presidente del PP de Andalucía pidió a la caja de ahorros vasca que sea "sensible" con los trabajadores de Cajasur y "mantenga la identidad cordobesa" de la entidad, dado "el valor extraordinario y el grado de confianza" entre los andaluces en la entidad cordobesa. Arenas criticó que Andalucía "esté perdiendo su sector financiero" y responsabilizó a Griñán. En su opinión, el Gobierno andaluz "va de fracaso en fracaso" y pidió al presidente que "se pregunte si debe seguir haciendo daño a Andalucía con su fracaso permanente".

- Patxi López. El lehendakari destacó que la adjudicación a BBK potencia su valor en un mundo financiero "en el que el tamaño sí importa" y certifica que esta caja y las otras vascas están entre las más solventes de España. "Me parece una noticia muy positiva para Euskadi", afirmó.

- Isabel Salud. La portavoz de Presidencia de Ezker Batua-Berdeak mostró su preocupación ante el hecho de que la adquisición de Cajasur por parte de BBK pueda ser "la antesala para privatizar las cajas de ahorros, con la entrada de capital privado, vinculándolas con el sector bancario y desnaturalizando su carácter público".

- Pilar González. La secretaria general del Partido Andalucista pidió a través de Facebook que los ciudadanos que tengan cuentas y dinero en Cajasur abandonen la entidad: "No con nuestro dinero. Saquemos el dinero de Cajasur: los ahorros, las nóminas, los recibos domiciliados. Se llevarán una caja vacía".