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El plan de protección del suroeste permite desdoblar el último tramo de la M-501

Elena G. Sevillano

El Consejo de Gobierno aprobó ayer el plan de gestión de las cuencas y encinares de los ríos Alberche y Cofío, el documento que servirá de base para ordenar las actividades que se pueden realizar en esta zona de gran riqueza ambiental del sureste de la región. El plan afecta a 86.000 hectáreas (el 10% del territorio de la región) y 19 municipios, a los que la Comunidad de Madrid dice cuánto pueden desarrollarse urbanísticamente y si pueden o no construir campos de golf u otras infraestructuras. Todo el área fue declarada hace unos meses Zona Especial de Conservación, es decir, territorio protegido. El plan, sin embargo, permite construir nuevas carreteras, como el polémico desdoblamiento de la M-501, más conocida como carretera de los pantanos.

La consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, aclaró en qué situación queda la vía, que cruza este territorio: "Su trazado está perfectamente delimitado en este plan de usos y, por tanto, el día que el Consejo de Gobierno determine si tiene que continuar con ese proyecto de la M-501 o no, esa infraestructura tendrá que someterse a las declaraciones de impacto ambiental". Será entonces, añadió, cuando se determine si el itinerario cumple los condicionantes medioambientales.

El texto divide las cuencas y encinares de los dos ríos en tres áreas. Una de ellas es de máxima protección (27.300 hectáreas); otra, que incluye masas forestales, montes preservados y de utilidad pública, dehesas y zonas agropecuarias, se considera de protección y mantenimiento de usos tradicionales (47.300) y una tercera, de uso general, (7.700 hectáreas) podrá albergar actividades industriales "que sean compatibles con la preservación del medio ambiente".

Ecologistas en Acción criticó ayer el plan, por considerar que muchos usos permitidos "son incompatibles con la conservación". También señaló que el plan apenas menciona al lince ibérico, cuando documentos de la Red Natura 2000 han detectado en la zona la presencia de este felino en peligro de extinción.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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