Villares pide que la ley evite la influencia de la Xunta en TVG

La ponencia parlamentaria para tratar la reforma de la ley por la que se creó hace 26 años la Compañía de Radio Televisión de Galicia (CRTVG) arrancó ayer con un clima de acuerdo entre los grupos parlamentarios. El primer compareciente en la Cámara fue el presidente del Consello da Cultura Galega, Ramón Villares, que reclamó un nuevo texto normativo que muestre un "compromiso explícito y claro con la cultura gallega" y una profesionalización de los órganos de dirección, que dé agilidad y evite la "instrumentalización gubernamental en la que derivó la práctica totalidad de las televisiones y radios públicas".

El nuevo modelo de gestión del ente debe basarse en la profesionalización y la autonomía, pero con un control por medio de una comisión de seguimiento parlamentaria. Así lo expresó Villares, que hizo referencia al documento Tres décadas de televisión en Galicia, elaborado por el Consello da Cultura hace seis años. En él, se pide también que el director de la CRTVG se nombre por mayoría parlamentaria suficiente, que su mandato sea de seis años, para no coincidir con las elecciones, y una financiación mixta entre capital público y privado.

Durante su intervención, Villares insistió en que los medios públicos son una "herramienta imprescindible para la construcción y mantenimiento de una idea de Galicia, como un espacio simbólico de identidad". Así, el "punto de partida inexcusable" para la nueva ley será "el papel central de los medios públicos en la normalización lingüística y cultural". El presidente de la institución rechazó que se incluya el castellano en la programación de la compañía: "La mayoría de los medios de comunicación se producen en castellano por lo que es una obligación tener un comportamiento diferente. Yo no contemplo esa idea. Ese debate no debería darse y abogo por que los tres grupos sean firmes", respondió a la pregunta formulada por el diputado del BNG Anxo Quintana. El nacionalista consideró que, aunque este debate no se ha abierto por parte de ningún grupo parlamentario, "hay algún sector minoritario que dicen que en Galicia hay dos idiomas y que los dos deberían estar reflejados en el ente".

Tanto Quintana como Pedro Puy, diputado del PP, y Xaquín Fernández Leiceaga, de los socialistas, coincidieron con las palabras de Villares. Puy incidió en la necesidad de que el director "deje de estar en las manos de las mayorías parlamentarias" y reiteró la "defensa de los valores autoidentitarios" que debe hacer la CRTVG, porque son un "elemento cohesionador interno pero también para abrirse al exterior". Por el mismo camino, Leiceaga expresó que los medios públicos son "una herramienta indispensable para que la lengua tenga una presencia más normal".