Elorza será candidato sí o sí

El viento sopla de cara, y con fuerza, para el alcalde donostiarra, el socialista Odón Elorza. Todos sus adversarios políticos han afilado las estrategias para estrecharle lo más posible el camino hacia el que sería su sexto mandato consecutivo. Tras 20 años al frente del Ayuntamiento, ¿se halla Elorza desgastado políticamente? ¿Tiene el ánimo suficiente para volver a encabezar la lista de su partido en 2011? ¿Cómo le está afectando la polémica surgida por las contratas municipales de limpieza? ¿Peligra su liderazgo entre los suyos?

"Odón está muy fuerte todavía", reconocen sin duda fuentes peneuvistas. "A nosotros no nos transmite cansancio; sigue apretándonos como al principio", sostiene un miembro de su equipo. Solamente en el PP se observa "una caída de la popularidad" del regidor, aunque también este partido es consciente de que el alcalde "siempre se crece ante las adversidades".

"Si renuncia mandaremos a los 'beltzas", ironiza un dirigente del PSE

"Cae su popularidad, pero Odón se crece ante la adversidad", reconoce el PP

Los grupos de la oposición han intentado poner en la picota a Elorza al descubrirse que el Ayuntamiento estaba pagando desde hacía nueve años las facturas de la limpieza de los edificios municipales sin mediar un contrato. "Un escándalo", según la oposición; "un error administrativo de bulto", para los socialistas. El conflicto abierto por este asunto ha reavivado en el consistorio el debate sobre la capacidad de liderazgo del alcalde, al tiempo que este, con una visión muy táctica de la política, alimenta la intriga dejando en suspense la decisión de si repetirá como candidato el año próximo.

Un estudio encargado por el PP para uso propio ya apreciaba en diciembre pasado cierto desgaste de la figura de Elorza. El PP prefiere poner en cuarentena los resultados -los populares mejoraban en intención de voto y el PSE veía algo rebajada su ventaja- porque coincidieron con la controvertida medida de prescindir de la iluminación navideña en las calles. A menos de un año de acudir a las urnas, la oposición ha encontrado ahora cebo vivo en el conflicto de las contratas de limpieza para tratar de erosionar al máximo mandatario donostiarra.

Los socialistas "están muy nerviosos, y Odón, especialmente faltón, haciendo aspavientos y sin argumentos", aseguran en el PP. La percepción de las cosas resulta diametralmente opuesta en el banquillo socialista: "Lo de la limpieza es un error serio, pero la situación está controlada. Esto no es Gürtel o el caso Margüello. Aquí no ha habido cazo", destaca un integrante del equipo de gobierno. "Tendrá muchos defectos, pero si algo no se le puede criticar al alcalde es su honorabilidad", añade.

El PNV impulsa con más ardor que nadie una operación para castigar al alcalde, aunque incluso en el grupo municipal peneuvista existe la convicción de que "la oposición frentista beneficia a Elorza". El grupo que encabeza Xabier Ezeizabarrena ha arremetido contra el regidor para desprestigiarle sumando a las críticas por la mancha de la limpieza la cadena de desaciertos del equipo de gobierno en la gestión del complejo Illumbe, que alberga la plaza de toros. El PNV recuerda que las arcas locales han debido pagar por esta causa 21 millones de euros a la empresa Nuevo Desarrollo Anoeta, propiedad de la familia Chopera, que aún reclama otros ocho millones más de intereses. El PP apostilla que el proyecto de una nueva estación de autobuses sigue pendiente desde hace 25 años, lo que demuestra la "incapacidad" de Elorza para gestionar un asunto crucial para la ciudad.

Adeptos y rivales de Elorza coinciden en la "mala imagen" que ofrece cuando usa un discurso victimista para criticar los supuestos agravios de San Sebastián con respecto a Bilbao: "Eso es incontestable. Otra cosa es estar todo el día lamentándose de ello", apuntan en su grupo.

"Lo que más está desgastando a Odón es el tiempo que lleva al frente del Ayuntamiento", sostienen sus compañeros de filas. "La crisis es lo que más le preocupa, pues le obliga a hacer recortes que no desea", añaden. Sin embargo, de ningún modo consideran que el alcalde se halle "desfondado, sin ganas o bajo de ánimo". Tiene a su favor que antes de terminar este mandato podrá exhibir la consecución de proyectos de calado para San Sebastián, como la ampliación del Museo San Telmo, el Instituto de Derechos Humanos y casa de cultura del Palacio de Aiete o el centro cívico de Intxaurrondo.

En el grupo municipal socialista y en el PSE no existe "ninguna duda" de que Elorza repetirá como cabeza de cartel en los próximos comicios. ¿Y si él decide lo contrario? "Mandaremos a los beltzas de Rodolfo" Ares, responde irónico, pero tajante un dirigente del PSE guipuzcoano. Es muy probable que Elorza haga pública su decisión de aspirar a un nuevo mandato en septiembre o octubre próximos, cuando San Sebastián pase, en su caso, el primer corte de ciudades candidatas a ser Capital Europea de la Cultura en 2016.

Ya conoce a sus principales rivales: Eneko Goia por el PNV y Ramón Gómez por el PP. Lo que no sabe es si habrá un tercero con peso para disputarle el trono. La incógnita sobre el posible regreso de la izquierda abertzale radical a las instituciones deja abierto el panorama.