Dos delanteros mejor que uno
Italia me ha gustado a medias. Es una selección que tiene que crecer, tiene que aprender a ser más dura y contundente. Tiene que llegar más y crear más ocasiones de gol. No se puede permitir el lujo de quedarse solo con la posesión del balón. Máxime, como vimos contra Paraguay, si esa posesión se debe a las características del rival y no a sus propios méritos.
En ese sentido no me ha sorprendido que el equipo saliese con la pelota al pie en la primera media ahora. Era inevitable, casi estábamos obligados a ello porque técnicamente somos superiores a Paraguay. Si encima se cierran y nos esperan con miedo es automático hacernos con el control de la pelota.
Italia tiene que crecer tal como la hizo en la segunda parte. Para mí hay una única clave de lectura. Sin un pasador, sin un jugador de peso, sin alguien capaz de dar el último pase, como los que darían Totti, Del Piero o Cassano, Italia no puede jugar con una sola punta arriba. Es un suicidio. Marcello Lippi se ha empeñado en hacer jugar a Marchisio de enganche, una posición que no es la suya, no le pega porque nunca ha jugado ahí. No es un jugador que puede lanzar a portería a sus compañeros. No es un jugador capaz de inventar y buscar apoyos. Y de hecho su sustitución es lo que ha cambiado el partido. Con su marcha, Italia ha empezado a tener espacios. No por Marchisio en sí, que lo intenta a pesar jugar en una posición extraña, sino porque Lippi cambió el dibujo táctico y colocó a Iaquinta al lado de Gilardino. Con dos puntas en lugar de una, el equipo creció y creó ocasiones de gol. En la primera parte no había tirado a puerta ni una sola vez. Eso es algo que debería hacer pensar a Lippi para el siguiente partido. Para mí la única manera de suplir la ausencia del clásico jugador de fantasía es jugar con dos delanteros arriba.
Marcello Lippi debería reflexionar. Italia no disparó ni una sola vez a puerta en la primera parte
Me quedo con el orden de Italia, también defensivo. He visto a un equipo atento y concentrado, menos en el gol. Paraguay marcó porque se aprovechó de la única ingenuidad que cometimos. Sé que a muchos les ha sorprendido el partido de Criscito y la personalidad con la que ha jugado en la banda izquierda. Era su sexto partido con la selección. Para mí estuvo bien sin más, se limitó a cumplir su tarea. No es de los laterales con empuje, de los que a mí me hacen vibrar.
De las selecciones que han debutado hasta ahora la única que me ha sorprendido es Alemania, por su juego rápido y dinámico. Creo que pueden llegar lejos porque es un equipo ordenado y tiene un plus de talento. He visto partidos demasiados tácticos. Parece que vale más empatar que ir a por el partido. Hay demasiado miedo de perder. Espero que Brasil, España y Portugal cambien la dinámica de este arranque de Mundial.
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