El sector financiero frena al mercado

Las malas noticias continúan cayendo sobre el sector financiero, en general, y sobre el sector bancario español, muy particularmente. La UE ha propuesto oficialmente la creación de un impuesto a la banca para crear un fondo que garantice la "caída ordenada" de las entidades con problemas. Con ello viene a exigir a los Estados de la UE que no auxilien más a la banca, en el caso de que encuentren nuevos problemas. Y, precisamente para los bancos españoles, los problemas pueden estar a la vuelta de la esquina si el Banco de España decide aumentar del 20% al 30% las provisiones de la banca para los inmuebles que permanezcan más de dos años en cartera, lo cual podría reducir el beneficio de algunas entidades hasta en un 10%.

La evolución de los valores bancarios españoles era ayer buena hasta que corrió por el mercado esta última noticia, que llevó a varios de ellos a cerrar la sesión en negativo. El Ibex 35 ganaba el 2,64% mediada la sesión y al cierre quedó en el mínimo del día con una subida de solo el 0,42%. Las acciones de Banco Santander llegaron a ganar el 3,18% y al final perdieron el 0,62%, mientras que BBVA llegó a subir el 3,55% para avanzar al cierre el 0,28%, en tanto que Banco Popular pasó de ganar el 2,19% a ceder el 0,36%.

Los problemas para el sector financiero europeo, ahora que todo el mundo quiere aportar su granito de arena en pos de un mayor control, contrastan con las noticias que llegan sobre la evolución de la economía, tras el último informe de la OCDE. La revisión al alza de las estimaciones de crecimiento debería traducirse en una mejora generalizada de las condiciones para todas las empresas, incluidas las financieras, pero los inversores no estaban ayer para sutilezas, sobre todo al comprobar que grandes inversores internacionales deshacen posiciones en el sector en Europa.

En Estados Unidos se olvidaba el malestar generado días atrás por la próxima regulación de los mercados financieros, ante la evidencia de que el crecimiento económico ya está en marcha. Los pedidos de bienes duraderos crecieron el 2,9% en abril, al tiempo que la venta de viviendas nuevas subía el 14,8% en ese mismo mes, tras la subida del 29,9% de marzo. Las estimaciones de la OCDE para Estados Unidos apuntan a un crecimiento del 3,2% del PIB en este año.