El gran negocio de los alojamientos

Hospedarse este fin de semana en un hotel bien conectado con el estadio Santiago Bernabéu es una misión imposible. La ocupación -70.000 plazas- ronda el 95% y los hoteles ya han colgado el cartel de "completo".

El alojamiento, sin embargo, no es para todos los bolsillos. Aprovechando la final de la Champions para la que los clubs han puesto en venta 43.000 entradas, los hoteles han elevado sus tarifas casi un 200%, como es el caso del Holyday Inn, cercano al estadio, que -sin contar el IVA- cobra este fin de semana 430 euros por una habitación doble, mientras que la semana que viene rebaja el precio a 185 euros. "Cuanta más demanda más alto es el precio", responden los recepcionistas. "Hay libertad de precios", indica Jesús Gatell, presidente de los hoteleros de Madrid.

El juego de precios lo practican la mayoría de los hoteles de la zona del estadio. Las tarifas para una habitación doble en el hotel Orense, de cuatro estrellas, oscilan entre los 88 y 99 euros, mientras que este fin de semana llegan a los 205 euros. Misma estrategia en AC Cuzco que pasa de los 120 euros que cuesta una habitación el sábado que viene a los 400 euros que está cobrando por este fin de semana.

Quienes también están aprovechando los beneficios que lleva consigo un evento deportivo de esta categoría son los vecinos de Chamartín -también de otros barrios- que, a través de anuncios en la Red, alquilan las habitaciones de sus propias casas desde 200 euros.

Steven, por ejemplo, pide 250 euros por persona y día por alquilar su casa de dos habitaciones. Incluye también recogida en el aeropuerto y traslado al estadio. Otro anunciante con las mismas características cobra 500 euros por noche.

Los hay que han probado a alquilar su diminuto estudio con un reclamo tan poco atractivo como "alquiler de habitación con sofá cama de dos plazas y una cama de 90, solo para descanso y exclusivamente para el día del partido". Cobra la friolera de 450 euros por persona y cama.