Caixa Catalunya manda más

Adolf Todó, director general de la nueva entidad que surgirá de fusionar Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa, ha dicho siempre que elegiría a los miembros de su cúpula directiva siguiendo un único criterio: cada uno de los puestos en juego deberá ocuparlo "el mejor" de cada una de las cajas, a pesar de que la de Catalunya equivale, por volumen de activos, al 80% del total. Ayer, las tres entidades difundieron el nuevo organigrama. Y 10 de 13 miembros del comité de dirección, incluidos el primer ejecutivo, Todó, y su mano derecha, Jaume Masana, proceden de Caixa Catalunya. Tarragona aporta dos, y Manresa uno.

En el organigrama final han influido dos factores: al director general de Caixa Manresa, Feliu Formosa, y al responsable de riesgos de esta entidad, Ferran Viladomat, se les ofreció un lugar, pero ambos declinaron al no ver claro su encaje profesional en la cúpula, pese a defender la fusión. El segundo factor es la edad del director general de Caixa Tarragona, Rafael Jené, que tenía ya prevista la jubilación, aprovechando que en breve cumplirá 65 años.

El tándem Todó-Masana ya funcionaba en Caixa Manresa, de donde ambos proceden. El presidente de la etapa transitoria, Narcís Serra, dejará el puesto en noviembre. Según fuentes financieras, al margen de que el propio Serra ha considerado que su continuidad "no sería dar el mensaje adecuado" cuando se pretende que se visualice el nacimiento de una nueva entidad y en un contexto de despolitización de las cajas de ahorros, la Diputación de Tarragona (CiU) puso la marcha del ex vicepresidente socialista como condición para votar a favor de la integración. La entidad fundadora de Caixa Tarragona, al igual que la Diputación de Barcelona, tienen potestad de proponer a un nuevo presidente, que requiere dos tercios de apoyo.

Las tres cajas destacaron ayer en un comunicado que, dadas las exigencias de crisis y la operativa que todo proceso de fusión comporta, la nueva entidad nace con una dirección "única y cohesionada, una potente columna vertebral, desde la perspectiva de gestión".

Pero más allá de la primera línea ejecutiva, Tarragona y Manresa han pactado compensaciones en representación con vicepresidencias (la primera para Manresa), un delegado general de Tarragona e importante margen de decisión en Obra Social.

La marcha de Rafael Jené fue comunicada por el actual director general de Caixa Tarragona en un escueto correo electrónico enviado a los empleados de la caja en el que también especificaba su próxima jubilación. Su marcha ahondó la incertidumbre de una plantilla inquieta por una operación que algunos interpretan más como una absorción por parte de la entidad principal, Caixa Catalunya. "No parece el momento más adecuado después de una gestión con más sombras que luces", señalaron fuentes sindicales. Estas lamentaron que Jené nunca se implicó con el territorio y optó por reforzar las inversiones en Barcelona, lo que se tradujo en una caída continuada de cuota de mercado de la entidad.

[La agencia de medición de riesgos Moody's anunció que otorgará una puntuación de A3 a la deuda a largo plazo de la entidad que resulte de la fusión].