Garrigós pide que no haya "interferencias"

La Cámara de Comercio de Alicante salió ayer a la palestra para terciar en la situación de la CAM y reclamó que hay que dejar a los directivos de la entidad "trabajar sin interferencias". Con esta alusión, la entidad que preside José Enrique Garrigós hacía referencia a la voluntad expresada este fin de semana por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), que animó a una fusión entre CAM y Bancaja frente a la posible absorción de la primera por Caja Madrid.

La institución defendió que los órganos directivos "están trabajando con eficacia y seriedad para la mejor defensa de los intereses de la provincia de Alicante". Y reiteró su confianza en la cúpula de la caja "a la hora de encarar posibles acuerdos o negociaciones con otras cajas de ahorros".

También habló sobre la CAM el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, que durante una visita a Vinaròs destacó la importancia de que las dos grandes cajas de ahorros valencianas "especialmente la CAM, se sientan apoyadas por la sociedad valenciana en la definición de su futuro".

Alarte hizo un llamamiento a la responsabilidad de la Generalitat y propuso "una alternativa valenciana": "Hace falta una posición clara sobre el futuro de nuestras cajas de ahorros". El líder de la oposición incidió en que es necesario "apostar por la voluntad de las cajas, de sus órganos de representación y de su realidad sociológica", aunque añadió que para ello hace falta un liderazgo que en estos momentos el presidente de la Generalitat no tiene. "No hay presidente de la Generalitat, ni hay Gobierno que sea capaz de plantear diálogo y una posición institucional para la solvencia, el futuro y la viabilidad de nuestras cajas", apostilló Alarte en su intervención.

En el plano político, también intervino la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, del PP. Preguntada por su opinión sobre la mejor opción de fusión para la CAM, Castedo reiteró lo que en alguna otra ocasión ya ha comentado: que la mejor fusión para la caja alicantina es aquella que afecte menos a los trabajadores de las entidades financieras y, sobre todo, "la que garantice que la sede central se quede en la ciudad de Alicante". La provincia, agregó, no puede permitirse "perder ni un ápice de poder".