Marsans confía en cerrar su venta
La sociedad dice que está a punto de firmar la operación, aunque sigue sin desvelar la identidad del comprador
El grupo Marsans se mostró ayer confiado de que podrá cerrar la venta de la empresa turística en pocos días. La compañía propiedad de Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, presidente vicepresidente de la CEOE, respectivamente, lleva meses con el cartel de "Se vende" colgado, pero su situación ha ido empeorando con el tiempo: la deuda no ha dejado de crecer, los proveedores han empezado a dejar de fiarles y la IATA, la organización internacional de las compañías aéreas, les ha retirado la licencia para vender billetes de avión.
La compañía no ha dejado de hablar de "inversores interesados" y anónimos que estudiaban su adquisición, pero nunca ha cuajado ninguna operación. Ayer, sin embargo, Marsans emitió un comunicado en el que aseguraba que "todos los datos" apuntan a que en "los próximos días" culminarán con "buen fin" las negociaciones que mantiene para la venta y la obtención de recursos que permitan la continuidad de la compañía.
El acuerdo, si cristaliza, supondrá en una inyección de capital que la empresa necesita para poder volver a operar con normalidad y lograr una tregua de sus acreedores. Marsans, arrastrada entre otros motivos por los recursos que inyectó en Air Comet, hasta que la aerolínea acabó en bancarrota, no concreta la deuda que acumula, y distintas fuentes del sector la sitúan en una amplia horquilla, entre los 200 y 400 millones de euros.
La incógnita es ahora la identidad de ese inversor dispuesto a inyectar liquidez en la empresa. Quien le representa y está reuniendo información sobre la empresa para tomar la decisión es Iván Losada Castell. La empresa valenciana Nuevas Formas y Diseño (NFD), a la que se vinculó en esta operación, aclara que nunca ha tenido ningún interés en la empresa ni relación con este proceso. La dote, aunque endeudada, incluye Viajes Marsans, Tiempo Libre, Rural Tours Viajes, Viajes Atenea, Viajes Crisol y Viajes Marsans Lusitana y una red de más de 650 oficinas.
Otros pretendientes que ha tenido Marsans, han resultado, cuando menos, controvertidos. El dueño de Fincas Corral, Josep Xicola, se interesó por Marsans hasta que fue detenido por los Mossos. Fuentes de la policía catalana explicaron que el arresto de Xicola se precipitó el pasado 30 de abril para evitar "un perjuicio mayor", puesto que ese día el dueño de Fincas Corral se desplazaba de Barcelona a Madrid para, según la policía, comprar Marsans.
Fuentes cercanas a la compañía niegan que Xicola estuviera a punto de comprar Marsans y califican de "disparate" la posibilidad de que la policía adelantase la detención para frustrarlo, ya que "Xicola se interesó como muchos más, sin que fructificase nada". Sin embargo, el empresario catalán sí se comprometió a avalar las deudas de las empresas de Díaz Ferrán ante la Hacienda Pública.
El comunicado en el que la compañía informa de que ultima la venta llega un día después de que trabajadores de Viajes Marsans entregaran un manifiesto al ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, en el que le piden que tutelara el proceso de venta de la agencia de viajes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.