Bailad, bailad, listillos
Lori Meyers se suma a las bandas de pop español que hacen música 'dance'
Lori Meyers era un paladín del pop. Estos veinteañeros granadinos podían sonar a Los Ángeles o a Redd Kross, pero siempre a pop clásico. Hasta ahora.
Mi realidad, primer tema de Cuando el futuro nos alcance, su cuarto disco, se abre con una batería electrónica, teclados y efectos de música de baile. Perdón. ¿Qué ha pasado aquí? "No nos hemos vuelto un grupo de baile. Pero tampoco hay que negar que somos del 81 y hemos ido a raves. Luego lo olvidas porque montas un grupo de rock, pero todo eso está ahí", dice Noni, cantante de la banda. "Y tampoco somos los únicos".
Eso está claro. "Cada vez más hay una avidez por bailar los temas pop. Debe de ser tendencia cuando hasta los más puristas, como Lori Meyers, se apuntan", dice Máximo Lario, promotor y mánager de Dorian, otro grupo que ha apostado por hacer pop bailable.
Se reivindica lo ibicenco. Algo que era anatema para el rock español
Todo empezó con El Guincho, el alias artístico de Pablo Diaz-Reixa, un canario asentado en Barcelona. En 2007, Alegranza, su único disco hasta hoy, mezclaba tropicalismo con electrónica, y fue el primer álbum indie español en mucho tiempo que se publicaba en el mundo anglosajón con éxito. Una ruta que han seguido otras bandas. Por ejemplo, los vizcaínos We Are Standard, que acaban de editar su segundo álbum. Es tan cercano al baile que ellos lo definen como post punk baleárico.
Esa reivindicación de lo ibicenco es otra novedad. Hasta hace poco Ibiza era poco menos que anatema. "Es verdad que hay vasos comunicantes. Ahora en la isla hay más permeabilidad al rock y de la misma manera los grupos se dejan remezclar por djs y productores y lo disfrutan", dice Lario. Es el caso del nuevo fenómeno internacional del indie español, los guipuzcoanos Delorean. En Estados Unidos son paradigma de lo cool. Hace 10 años eran unos adolescentes que hacían hardcore y ahora editan Subiza, un disco de algo que parece house pop y remezclan a Franz Ferdinand.
Es una evolución natural, dice el cantante de Lori Meyers. "Estamos flipando con las máquinas. La intención del disco era esta. Jugar con las baterías acústicas y meter samplers para que todo fuera más electrónico, más de baile".
Hay voluntad de cambio. El productor es el argentino Sebastián Krys, que ha trabajado con Shakira o Bisbal. "Es un profesional y eso es lo que buscábamos, profesionalidad. Tenemos 28 años y llevamos desde los 20. La diferencia no es que este disco o el de tal otro sea o no bailable. La diferencia es quitarte de encima los prejuicios. Yo creo que la tendencia, realmente, es esa".
Otros nombres de la danza ilustrada
- Delorean
Subiza, el nuevo disco de los de Zarauz, es una pequeña sensación en Estados Unidos. En 2010 han planeado tres giras por ese país.
- Dorian
Es un cuarteto barcelonés asentado en Madrid. Su primer disco era más bien pop lánguido, para el segundo, que contenía su éxito En cualquier otra parte, ya tenía querencia a la pista. Y el tercero, sobre todo en directo, es un completo manual de pop para bailar.
- We Are Standard
Es el grupo de Javi Letamendia, que fuera batería de El Inquilino Comunista, un mito del rock en los noventa y también lo menos rítmico que quepa imaginar. Pero el último disco de We Are Standard lo produjo Andy Gill, músico inglés especialista en cruzar punk y funk rompecaderas.
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