Jugar como siempre, atacar como nunca

El Barcelona lleva disputados 116 partidos desde que Josep Guardiola fue nombrado entrenador del equipo. En 50 pasó por encima de sus rivales consiguiendo resultados que le alcanzarían el miércoles para eliminar al Inter -nuevo líder de la Liga italiano tras el pinchazo del Roma-; esto es, al menos ganó por 2-0. Además, en otros nueve terminó ganando por 3-1, un registro que le garantizaría la prórroga.

El Barça ha ganado seis títulos, a caballo entre dos temporadas, y pasado mañana, contra el Inter, opta a disputar la sexta final. Sería la primera vez que jugase dos finales seguidas en 110 años de historia y, además, el escenario donde se disputará la final del 22 de mayo, el estadio Bernabeu, invita por sí sólo a considerar el duelo con el Inter como algo más que un partido de vuelta de las semifinales de la Champions.

"Es el partido", ha dicho Guardiola, quien desde que terminó el encuentro contra el Xerez, el sábado, sólo ha mandado un mensaje a su equipo: "No es un encuentro más. Se trata de hacer historia". De hecho, los jugadores del Barça llevan tan dentro el duelo que tampoco van a necesitar muchas consignas. Lo tienen muy claro. Empezando por el cuerpo técnico, el partido está realmente más que visualizado.

"El Inter no se meterá atrás del todo. No lo ha hecho antes y no creemos que lo vaya a hacer ahora", advierte Juan Carlos Unzue, preparador de porteros del Barça. Al fin y al cabo, admite que el Inter tiene gente arriba que con un balonazo "gana un partido". Unzue esgrime la idea primaria del equipo: "El rival nos tiene que preocupar lo justo por mucho que sepamos que, si ha sido capaz de meternos tres, es que es muy bueno". De lo que se trata, en fin, es de hacer lo que el Barça ha hecho mil veces: "Tenemos que confiar en lo que hemos hecho para llegar hasta aquí. Estos jugadores se han ganado el respeto del público, de los rivales y de la prensa y, por encima de todo, se han ganado el respeto del compañero por el compañero. Tú por mí y yo por ti". Unzue no duda. "Se van a ayudar otra vez en el campo, como siempre. Soy optimista", avisa el navarro.

"Se trata de meterles ritmo, de hacerles correr", visualiza Xavi. "Hemos de hacer nuestro el partido, ser nosotros más que nunca, dominar y presionarles muy arriba". Intuye el volante que el Inter dejará la pelota al Barça, pero matiza: "Estarán muy encima". Por eso, insiste: "Hemos de mandar como nunca". Xavi no teme un partido especialmente duro. Por lo menos, no tan marrullero como el de la ida. "No podrán", dice. Tercia Bojan: "Si sale duro, lo combatiremos con goles". "Nos darán patadas, nos provocarán, hablarán mucho. No hemos de caer", advierte Touré. "Pararán mucho el partido para no dejarnos jugar. Hemos de ser rápidos", añade el marfileño.

"Lo que no vamos a hacer es especular", sentencia Gaby Milito, que marcará seguramente a su hermano, Diego: "Ni podemos, ni queremos ni sabemos", cierra el argentino al hablar del duelo contra el Inter. Piqué resume: "Es el partido, sin más. Más allá no hay nada". Le reconforta saber al central que en 50 encuentros de 106 han conseguido un resultado que les clasificaría. "El dato refuerza nuestro optimismo", razona. Tan directo al hablar como al subir el balón desde su zona, el central internacional no duda en afirmar: "Hemos de ir a por el gol y dejarnos de mandangas. El Camp Nou no es San Siro. Es muy grande, el césped estará bien... Se trata de hacer lo que hemos hecho mil veces. Si jugamos como sabemos, como hemos jugado tantas veces... Si pueden, que nos paren".