El animal de laboratorio
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El próximo 24 de abril es el día mundial del animal de laboratorio. Es un día para reflexionar sobre el daño continuado que se les inflige y dar un paso adelante para terminar con tanto sufrimiento.
La industria que utiliza así a los animales sabe perfectamente que sus experimentos son en su mayor parte irrelevantes. Es una industria anclada en el pasado que se mantiene por inercia, sin que nadie dé un paso adelante para acabar con el profundo sufrimiento que causa a otros seres vivos.
Los científicos reconocen cada vez más que con la investigación con técnicas que no utilizan animales se obtienen datos relevantes, específicos y acertados.
Muchos países ya han aprobado leyes que prohíben este tipo de prácticas. Es el caso de Italia, India, Israel y Argentina, entre otros muchos. Suprimirlas no significa dejar al ciudadano desamparado, pues hoy en día hay procedimientos alternativos como estudios epidemiológicos, técnicas in vitro de cultivos en tejidos animales y vegetales, restos de placenta, huevos, cultivos celulares, cultivo de órganos, y un largo etcétera.
A nivel individual podemos rechazar cualquier tipo de producto que haya realizado experimentos en seres vivos y optar por los que sabemos con certeza que no lo hacen.
Los Gobiernos no pueden continuar protegiendo a las industrias que practican la cruel práctica de la vivisección si nosotros como ciudadanos dejamos bien claro que ya estamos más que hartos de tanto maltrato animal.
