El Getafe se sitúa a los pies de Europa

Una jugada de estrategia del Getafe bien lanzada por Pedro León, mejor continuada por Boateng y ejecutada a la perfección por Rafa, un defensa interesante al que el nombre no acompaña, colocó al cuadro de Míchel a los pies de Europa en un partido que castigó la candidez del Xerez, mucho ruido y pocas nueces. El colista desaprovechó un saco de ocasiones y frenó en seco su trayectoria al alza, tan positiva en el último mes y medio que hasta se permitió soñar con la permanencia, cada vez más y más lejos.

Aletargado hasta la entrada de Casquero, el conjunto madrileño jugó con fuego en la primera parte y a punto estuvo de llevarse un chasco por su falta de colmillos, esta vez ante un Xerez que pese a ser el último de la fila a punto estuvo de meterle en un buen lío. Por más que Míchel ideó un plantel valiente -qué menos ante el novato de la temporada-, con una línea de tres medios y Manu del Moral y Pedro León dispuestos para surtir a Miku desde las dos orillas, la escuadra de Gorosito se le subió a las barbas hasta que Rafa mató el partido. La acción mostró la capacidad del Getafe para exprimir los recursos de que dispone y reforzó la morriña que el equipo tiene de Soldado, que lleva un mes lesionado y aun así está detrás del 40% de sus goles.

El Xerez lo sabía y durante un periodo anuló las llegadas del Getafe, al que negó las bandas y obligó a atacar por el centro. Aunque no parece que le quede mucho tiempo de reacción la llegada de Gorosito al banquillo le ha sentado de rechupete al club, que sólo había perdido uno de los últimos siete partidos. El resto los sacó adelante de acuerdo con la media inglesa, sin regalar un punto en casa y puntuando fuera, sin más invento que el libre albedrío de Víctor Sánchez. Con bula papal para hacer a su antojo en la línea de creación, el centrocampista profundizó el balón por las bandas, unas veces a Momo y otras a Orellana, que metieron en bastantes líos a los defensas del Getafe con sus continuas diagonales y cambios de orientación y examinaron a Codina.

La fiabilidad del portero en los intentos a quemarropa de Aythami alivió el agobio que le entró al final al grupo de Míchel, que perdió a Pedro León, expulsado por una entrada a destiempo, para el partido con el Villarreal, un rival directo por los puestos europeos.