Aguirre no aplica su teoría de tolerancia cero a Sergio Gamón

Esperanza Aguirre, presidenta regional, tiene perfecta capacidad para sostener una cosa y algo que se asemeja a su contraria sin mover una pestaña. El pasado miércoles, tras la Ejecutiva del Partido Popular regional, dictó su doctrina para aquellos que estuvieran bajo el ojo de la justicia. Y fue implacable: deben dimitir.

Pero ayer fue más suave. En este caso las preguntas eran sobre Sergio Gamón, imputado por el caso de espionaje a políticos en la Comunidad de Madrid. Y ya era "distinto". El matiz es que a Gamón, ex director de Seguridad y aún a sueldo del Gobierno regional, "nadie le ha acusado de ningún tipo de enriquecimiento personal. Por lo tanto, no mezclemos una cosa con la otra. Yo no tengo ninguna duda, ni razonable ni no razonable, de que aquí no ha habido enriquecimiento de ningún tipo".

"No ha habido enriquecimiento personal", justifica la presidenta

El ex director de Seguridad está acusado de malversación

Gamón, que actualmente es jefe de Seguridad de instalaciones de la Comunidad, está imputado por malversación de fondos públicos. Sigue pues cobrando un sueldo de la Consejería de Interior.

La réplica de Esperanza Aguirre tiene su origen en unas declaraciones del vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, que expresó la incoherencia de la presidenta al mantener en su puesto a Sergio Gamón tras expresar su convicción de que los imputados en causas judiciales debían abandonar sus cargos. El vicealcalde fue uno de los políticos madrileños que fue espiado, tal y como destapó este diario.

La presidenta insistió ayer en sus tesis y reiteró que "nada tiene que ver" el caso Gürtel con el caso de los espías. En este sentido, y al igual que ya hiciera el pasado miércoles ante la Junta Directiva del Partido Popular de Madrid, señaló que la corrupción "es el peor delito que puede cometer un político" y destacó que enriquecerse ilícitamente utilizando el cargo "es algo imperdonable". Pero nada opinó sobre el presunto uso de fondos públicos para fiscalizar los movimientos de ciudadanos.

"Dije que, prescindiendo de la responsabilidad penal, cuando hubiera dudas sobre el enriquecimiento o sobre la utilización de fondos públicos para el enriquecimiento personal con una duda razonable, debían apartarse de sus funciones mientras se dilucidaba esa cuestión", resaltó ayer Aguirre. A renglón seguido, matizó que, en el caso del espionaje, el imputado Sergio Gamón "es un profesional miembro de las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado, concretamente comisario de policía, que antes era un jefe de escoltas de la Vicepresidencia primera".

Sobre este mismo asunto, el vicepresidente regional, Ignacio González, dijo el jueves que a él no le constaba que Sergio Gamón estuviera imputado, con lo que eludió la pregunta al respecto.