Canal 9 hizo 183 contratos verbales irregulares para la visita del Papa
Vicente Sanz, entonces secretario general, firmó las comunicaciones de ceses
Seis tomos, más de 5.000 folios, recogen la información aportada por José López Jaraba, director general de RTVV (Ràdio Televisió Valenciana) desde el pasado octubre al instructor del caso Gürtel en el Tribunal Superior de Madrid. Y uno de esos tomos tiene el detalle de 183 contratos verbales (más concretamente de las liquidaciones personales de tales acuerdos) para la visita del Papa en 2006 con asistentes de programas, coordinadoras de invitados, auxiliares de explotación, operadores de cámara, operadores de sonido, operadores de equipo, auxiliares administrativos, auxiliares de realización, conductores y especialistas en vestuario.
Vicente Sanz, entonces responsable de recursos humanos y ahora destituido por su imputación por acoso sexual contra tres periodistas, realizó estos contratos irregulares, por poco habituales en la Administración. Eso costó al ente público 122.109,41 euros. Pagó entre 109 y 2.500 euros brutos por entre tres y nueve días de trabajo. Ni este dato ni otros tantos en relación con la visita del Papa se pusieron a disposición de sindicatos y del consejo de administración. Ni tampoco los casi tres millones de euros que pagó el ente a Overon, empresa encargada del traslado de la señal, sólo por alquiler de material y disposición de personal para el tráfico de la señal.
RTVV contrató con Teconsa para la visita del Papa al precio más alto
Vicente Sanz y el actual jefe de gabinete de Jaraba firmaron el acuerdo
Pedro García, en su condición de director general de RTVV, firmó en febrero de 2006 el convenio de colaboración con la fundación organizadora del V Encuentro Mundial de la Familia, cuyo máximo responsable era el obispo auxiliar Esteban Escudero Torres. En ese convenio, queda clara la exclusividad que gana RTVV en la emisión del evento y las obligaciones de dotar de todos los recursos materiales de última generación y humanos para cumplir el objetivo.
Es ahí donde entra en escena la participación sorprendente de la empresa Teconsa. En abril de 2006, RTVV abre pliego de condiciones para la contratación urgente mediante procedimiento negociado del suministro en régimen de alquiler del equipamiento de pantallas de vídeo, sonido y megafonía. El 4 de mayo, de entre siete ofertas, RTVV escoge la de Teconsa, por casi siete millones de euros, cuyo 50% se abonaría a la misma firma del contrato; el 30% el 20 de junio de aquel 2006; y el 20% restante el 9 de julio siguiente mediante pagaré bancario con vencimiento 11 días después. Era la oferta más cara y, como señalaría después la Sindicatura de Comptes, objetivamente la de menor experiencia y menores garantías de ejecución satisfactoria. Teconsa es una constructora, no una empresa de imagen y sonido. De hecho, como consta en la memoria que Jaraba ha enviado al juez y en la que entonces remitió la empresa, su aval lo deposita en la solvencia acreditada por Sirius Showequipment y Crystal Sound.
Esa contratación, sospechosa por la naturaleza de la empresa beneficiada, fue una decisión de José Llorca, entonces director de RTVV; de Juan Prefaci, entonces jefe de gabinete de Pedro García y ahora secretario general en funciones; Vicente Sanz, el ex secretario general destituido; Ricardo Calatayud, director económico financiero; Benjamín Íñiguez, jefe de la unidad de compras de RTVV; Encarna Pérez, representante de los servicios jurídicos, y Luis Sabater, a la sazón jefe del Departamento Técnico.
Teconsa fue la adjudicataria de las obras de la variante de Olleros de Alba (León) bajo el mandato como consejero de José Manuel Fernández Santiago (PP), imputado en el caso Gürtel. La Fiscalía Anticorrupción sospecha que esas obras tuvieron un sobrecoste del 23%. La sospecha sobre Teconsa es que repartió comisiones ilegales a políticos de parte de la trama de Correa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.