La sociedad del Museo Balenciaga cometió irregularidades en 2005

La polémica generada en torno al Museo Cristóbal Balenciaga de Getaria sigue dando coletazos. A punto de finalizarse el edificio que albergará la obra del modisto vasco -se inaugurará en marzo de 2011- un informe de fiscalización presentado ayer por el Tribunal de Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) señala que la sociedad Berroeta Aldamar no cumplió con la normativa durante 2005 aunque lo hizo "razonablemente" en 2006 y 2007.

Fundada para la construcción del museo, Berroeta Aldamar está formada por la Diputación Foral de Guipúzcoa, el Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Getaria. Su gerente fue hasta 2007 Mariano Camio, ex alcalde de Getaria (PNV) que se enfrenta a una querella criminal interpuesta en 2008 por la Fiscalía de Guipúzcoa por falsificación de documentos, engaño y uso indebido de dinero. En esta trama le acompaña su entonces pareja sentimental Julián Argilagos, arquitecto cubano encargado del proyecto museológico durante la primera etapa y reclamado por la justicia.

Realizado a petición del pleno del Parlamento Vasco, el informe de Berroeta Aldamar relativo a 2005, 2006 y 2007, contempla "la revisión de la legalidad en materia de contratación de bienes y servicios, subvenciones recibidas y otras normas legales" según recoge el comunicado del TVCP. El tribunal explica que "no se analizan otras alternativas posibles" para afrontar la construcción del edificio, afirmando que la constitución de una sociedad limitada, aunque sea sin ánimo de lucro, "no parece que sea la más adecuada".

En cuanto a la contratación, el informe destaca "algunos incumplimientos de la legislación aplicable fundamentalmente por la falta de publicidad exigida". Respecto a las cuentas anuales, el TVCP emite una opinión "favorable" en cuanto a su "presentación y contenido en los tres ejercicios" aunque matiza algunas salvedades, entre las más destacadas, figura "la falta de registro del valor venal del derecho de superficie sobre el terreno transmitido por el Ayuntamiento para la construcción de la segunda fase del museo Balenciaga". Los terrenos son propiedad del Ayuntamiento de Getaria que cedió el derecho de superficie a la sociedad de forma gratuita hasta 2029 pudiendo extenderse hasta 2078.

Durante 2005 y 2006 únicamente el gerente Mario Camio tenía firma autorizada para disponer de las cuentas corrientes de la sociedad. En 2007 se modificó el procedimiento autorizándose a tres personas y exigiendo la firma mancomunada de al menos dos de ellas.

Durante ese año también, Berroeta Aldamar aceptó la dimisión de Camio y además, a la vista de un informe jurídico sobre las irregularidades detectadas, la sociedad presentó junto a la Fundación Balenciaga - donde está el Ministerio de Cultura- una denuncia ante la fiscalía contra Camio. En abril de 2008 el pleno del Parlamento Vasco aprobó la creación de una comisión especial de investigación. En ese momento, el museo se encontraba con una obra en curso con contratos en vigor pero con una deuda que ascendía a casi 3.500.000 euros y que para sufragar tanto Gobierno vasco como Diputación tuvieron que aprobar y tramitar ayudas de urgencia. El coste final de las obras, incluidos los honorarios sobrepasará los 21 millones de euros.