Ferrocarrils pagará 420.000 euros a una empresa por las obras del metro
Ferrocarrils de la Generalitat (FGV), empresa que explota la red de metro de Valencia, tendrá que pagar 419.238,32 euros a un concesionario de automóviles porque las obras que realizó perjudicaron en esa cantidad al negocio. Lo ha decidido así el Tribunal Supremo, admitiendo el recurso presentado por la empresa y resolviendo como lo hizo el juzgado de primera instancia de Valencia que se ocupó del caso y en contra de la Audiencia Provincial de Valencia.
El concesionario denunció que las obras que empezaron en marzo de 2001 y acabaron en diciembre de 2002 "impidieron el acceso normal a la exposición de los vehículos y al taller de reparaciones", en la calle de Amadeo de Saboya y reclamó las pérdidas por lo que había dejado de vender, por lucro cesante. Pero además, por "la no realización del plan de actuación comercial" y por la renta del local que debió pagar, que "fue infrautilizado durante esos meses".
El Supremo ha invalidado el argumento de la Audiencia de Valencia, que defendió que FGV no tenía responsabilidad porque la obra se ejecutaba para la Administración, en virtud de un programa aprobado sin alegaciones del concesionario.
El tribunal concluye, para desmontar una de las alegaciones, que la demanda se presentó en tiempo y forma, que FGV se rige por las normas del derecho privado como responsable de unas obras. Además, precisa que al tratarse de daños continuados, hay que considerar que el comienzo de la prescripción es el mes de diciembre de 2002, cuando presentaron la demanda, que fue la fecha de finalización de los trabajos de construcción en la zona del concesionario.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.