Bengoa mantiene los interrogantes sobre sobre la cirugía cardiaca en Álava

La creación de un servicio de cirugía cardiaca, una de las reivindicaciones del PP alavés, sigue entre interrogantes incluso después de que este partido, el Departamento de Sanidad y el grupo socialista rubricaran ayer el acuerdo sobre la reordenación hospitalaria de Álava -uno de los puntos de su pacto- y la consiguiente ampliación de la oferta sanitaria.

El consejero, Rafael Bengoa, no quiso detallar qué ocurrirá con este servicio en Álava, pero apuntó que es posible que algunas especialidades "se tengan que concentrar para toda Euskadi en una de las provincias", dejando la puerta entreabierta a unificar la cirugía cardiaca de Euskadi. A día de hoy, este servicio se presta en los hospitales vizcaínos de Cruces y Basurto, mientras que en Guipúzcoa el servicio está concertado con un centro privado. Los alaveses, menos de cien cada año, deben viajar a Vizcaya para someterse a estas operaciones.

Sanidad y el PP firman el acuerdo de la reordenación sanitaria alavesa

En la última comparecencia sobre la reordenación hospitalaria, el PP incidió en mantener este debate y el de la cirugía cardiaca por separado. Las reticencias para que Álava tenga su propio servicio se basan en que éste debe tener un mínimo de operaciones al año para garantizar la seguridad en las intervenciones y su calidad. Los pacientes operados en Álava no son, según los datos que maneja Osakidetza, suficientes para crear un servicio propio en la provincia.

En la comparecencia, el consejero y el secretario general del PP, Iñaki Oyarzábal, evitaron dar detalles del acuerdo, ya que el proyecto se presenta hoy. El futuro hospital universitario de Álava abrirá sus puertas en cuatro o cinco años con el objetivo de convertirse en una ciudad hospitalaria entre "las más seguras de Europa". Contará con varios edificios en los aledaños del hospital Txagorritxu, una unidad maternoinfantil y nuevos quirófanos y servicios. El de Santiago se convertirá en un hospital para crónicos.