El PP sugiere "un gobierno de concentración" en la Diputación
El presidente del PP alavés, Alfonso Alonso, no se mordió la lengua ayer en su comparecencia para hablar de la supuesta trama de corrupción que afecta al PNV alavés y sus eventuales consecuencias institucionales. "Si se mantiene el deterioro", afirmó el que fuera alcalde de Vitoria, es posible que el diputado general, Xabier Agirre, no agote la legislatura al frente del ente foral. Por ello, el popular sugirió la posibilidad de que "un gobierno de concentración" que incluiría a todos los partidos que no involucrados en el escándalo, excluyendo a la izquierda abertzale, tome el relevo hasta las elecciones de 2011.
A la espera de que el juez decrete el fin del secreto de sumario y se aclare hasta dónde llegan los tentáculos de la trama y el grado de implicación de cada uno de los afectados, un total de ocho destacados miembros del PNV alavés figuran como imputados en la investigación judicial sobre una presunta una red para el cobro de comisiones ilegales en la compraventa de terrenos en el Parque Tecnológico de Miñano, en las afueras de Vitoria, y otros negocios. Las acusaciones cayeron como un mazazo en el ya de por sí debilitado gobierno del PNV en la Diputación, que ya perdió a Aralar como socio por discrepancias en torno a los presupuestos para el ejercicio 2010. "Quizá la legislatura tenga que terminar prescindiendo de Agirre", lanzó al aire el dirigente popular en su comparecencia ante los medios de comunicación en Vitoria. "Si la situación sigue en el punto de deterioro en el que se encuentra, la reflexión sería que los partidos políticos que no están implicados en este asunto decidan terminar la legislatura en un gobierno de concentración", explicó. "Un gobierno formado por los partidos que no estén involucrados en los asuntos de corrupción, y obviamente, tampoco habrá partidos que formen parte de entramados que apoyan a los terroristas", añadió. Aunque no descartó ninguna opción, Alonso explicó que su partido no se plantea como objetivo inmediato promover este año una moción de censura contra Agirre, -reclamada con insistencia al PSE durante 2009- salvo que considere que sea necesario "para garantizar la confianza y la credibilidad de las instituciones".
"Quizá la legislatura tenga que terminar prescindiendo de Agirre", dijo Alonso
El objetivo del PP alavés, prosiguió, es "construir una alternativa y devolver la credibilidad a las instituciones alavesas". También recordó que una moción de censura "no es cosa de un solo partido porque requiere el acuerdo" de otras formaciones para que salga adelante.
"El PP sabe que es el partido que más responsabilidad tiene porque es el partido más votado en la Juntas Generales", añadió Alonso, en una comparecencia en la que predominaron los ataques a la entente PNV-PSE en el territorio alavés. El dirigente popular no dudó en acusar a ambas formaciones de usar las instituciones del territorio "para repartir espacios de poder entre el aparato de los partidos". Estas prácticas, destacó, son "vergonzosas" y generan desconfianza entre los ciudadanos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.