El alcalde accidental de El Ejido conocía las actividades de la trama

El encarcelamiento de Juan Enciso aupó en octubre a su edil de Obras Públicas, Ignacio Berenguel, a la alcaldía de El Ejido (Almería). En una de sus primeras intervenciones tras la caída del líder de su formación política, en la que no escatimó esfuerzos para defenderle, aseguró desconocer la trama de corrupción urdida en torno a la empresa mixta de servicios municipales Elsur. Las escuchas que contribuyeron a destapar la supuesta red de corrupción, sobre las que la juez instructora ha alzado el secreto, desdicen sin embargo a Berenguel, quien en una de sus últimas comparecencias insistió en desvincularse de la trama. "La verdad siempre prevalece y el tiempo nos pondrá a cada uno en nuestro sitio", declaró entonces enfático.

En varias conversaciones telefónicas mantenidas con uno de los principales acusados por este caso de presunta corrupción, el alcalde en funciones reconoce estar al tanto de las actividades de los arrestados. El 30 de julio, José Amate -veterano ejecutivo de Abengoa y ex director de producción de Elsur, encarcelado por esta causa- le interroga sobre los motivos por los que se admite en el Consistorio "lo que está haciendo" José Alemán -ex interventor y presunto cerebro de la trama- cuando "todo el mundo lo sabe". "¿El qué, lo de la sociedad que tiene con Juanito? (...) sí, eso lo sé", responde Berenguel quien, en otra charla, sostiene que Alemán "todo lo hace en connivencia" con Enciso.

De prevaricación y cobros en negro, Berenguel llega a hablar con Amate en relación con los tejemanejes entre el ex interventor y otro de los acusados, el empresario Juan Antonio Galán. Éste "es socio al 50% de José Alemán. Eso es prevaricación", le espeta el ex directivo de Elsur. Lejos de sorprenderse, el alcalde accidental afirmó estar desde hacía un año al tanto del asunto, que prefiere tildar de falto de ética.

En estas charlas, intervenidas en julio y agosto, Amate dice además que existe una lista con "todas las personas del Ayuntamiento que cobran" mensualmente de Galán. "¿Lo sabes?", vuelve a preguntar a Berenguel y éste, nuevamente, contesta que sí. "No tengo la lista, sé que algunos...", agrega el ahora primer edil quien, en otra llamada se interesa por los citados pagos. "El impuesto revolucionario", le explica Amate, quien, en la misma conversación, llega a hablar de "corrupción total en el Departamento de Intervención".

Berenguel no se perfila como el único miembro del equipo de gobierno que pudo tener conocimiento previo de la existencia de posibles irregularidades. Su portavoz, Adela Cantón, archivó a petición de Enciso un expediente que habría supuesto a una tercera persona el pago de una multa de un millón de euros.

Sin embargo, el alcalde accidental, el defensor de esa verdad que siempre prevalece, llega incluso a ser sorprendido en las escuchas policiales planteando la pertinencia de "acabar" con José Amate. "Hay que matarlo", dijo el 31 de julio el edil que hoy explicará públicamente su postura sobre el sumario de la operación.